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La pasión del poder

Teoría y práctica de la dominación

José Antonio Marina

Anagrama. Barcelona, 2010. 1a edición 2008.

Habrá a quien le cueste trabajo aceptar que el poder está en todas partes o dicho de otro modo que todo mundo tiene poder, desde luego en distintas cantidades y sobretodo, ejercido de diversas maneras; basta con pensar, sinceramente, ¿quiénes me controlan y a quiénes controlo?

El autor nos lleva a reflexionar con infinidad de pensamientos y frases como: Es bello tener la fuerza de un gigante pero es horrible emplearla como un gigante, Shakespeare.

Cuando afirma que: una parte del discurso político está teñido de imposturas, creo que se queda corto pues las promesas de campaña rara vez se cumplen y Lord Acton pareciera darnos la razón cuando sentencia: el poder corrompe siempre.

Propone varias definiciones de poder:

  • Es la capacidad de hacer real lo posible.
  • La realización de un propósito a pesar de las resistencias, Steven Lukes
  • La producción  de los efectos deseados sobre otros hombres, Bertrand Russell
  • La probabilidad de imponer la propia voluntad, dentro de una relación social, aun contra toda resistencia y cualquiera que sea el fundamento de esa probabilidad, Max Weber
  • Es la habilidad para controlar el proceso de toma de decisiones en una comunidad. D’Antonio y Form 
  • El control ejercido sobre la actividad de otro mediante la uitización estratégica de recursos, Giddens
  • Doy como 1a inclinación natural de toda la humanidad un perpetuo e incansable deseo de conseguir poder que sólo cesa con la muerte, Hobbes.

Esto viene a colación porque … el objetivo del poder es siempre apoderarse, dominar algo o a alguien.

Pero también advierte que no sólo se trata de conseguir lo que uno quiere sino que con frecuencia se trata de impedir que otro haga lo que desea. Será por eso que tanto se habla de La cubeta llena de cangrejos mexicanos que no pueden escapar porque todos se dedican a impedir que lo haga el vecino en vez de ayudarle.

El líder puede llegar a convencerse de que lo que hace es para el bien de sus seguidores, sin embargo, en infinidad de ocasiones lo que le atrae es el poder de dirigir y manipular a otros ¿cuántos de los políticos que sufrimos caben aquí?

Qué tan cierto es que La ética aparece como el gran esfuerzo para frenar al poder y como el gran esfuerzo para inventar un poder diferente. Marina habla de tres saltos que generan nuevas energías y posibilidades:

  1. La inteligencia humana convierte todos los deseos en insaciables, incluido el deseo de poder,
  2. Los mecanismos de dominación se van haciendo cada vez más simbólicos,
  3. Necesidad de legitimar el poder, de justificar de alguna manera la obediencia.

En su análisis aborda, obviamente, el tema del control o algunas de las estrategias para ejercerlo, como son la fuerza física o la amenaza; La mayor sutileza en el control se da cuando podemos suscitar en otra persona, como decisión propia, aquello que nosotros sabemos que es decisión nuestra.

Existe mucha gente, consciente, del poder que otro ejerce sobre él pero Crevecoeur sugiere ¿en qué soy cómplice de su poder y cómo lo refuerzo? 

Describe situaciones que son dignas de meditar antes de entrar de lleno a ese juego de ajedrez que denominamos vida, Lo importante no es el poder que tienes sino el que tu enemigo cree que tienes.

Querámoslo o no formamos parte de una ecuación en la que con frecuencia se alteran las posiciones, En la relación de poder está el dominador y el dominado.

¿Debemos educar a nuestros hijos para la obediencia o para la rebelión? Vale la pena ir más allá del discurso y sopesar las probables consecuencias de nuestras decisión porque seremos los primeros en enterarnos que tan conveniente fue.

Dice Marina que como animales gregarios que somos estamos inmersos en una jerarquía pero somos rebeldes y aspiramos a emanciparnos.

Plasma una serie de pensamientos que nos estremecen porque obligan a pensar en primera persona, he aquí unas cuantas:

Personalidad autoritaria es la que desea una personalidad fuerte a la que someterse.

Someterse es un acto físico que no implica aceptación ni obediencia.

Docilidad ausencia de resistencia a las órdenes, obediencia fácil, flexibilidad acomodaticia.

Sumisión obediencia total, incapaz de pensar una alternativa.

Para que triunfe el mal, basta con que los hombres de bien no hagan nada. Edmund Burke.

Sólo se puede gobernar a un pueblo ofreciéndole un porvenir. Un jefe es un vendedor de esperanza. Napoleón.

Yo he enseñado a los príncipes a ser tiranos pero también he enseñado al pueblo a destronar a los tiranos.

Habla de los premios y de los castigos, Todo gobernante sabe que si un pueblo siente miedo está dispuesto a aceptar propuestas que en circunstancias normales no aceptaría. Recordemos que fue una de las estrategias favoritas de Bush Jr. ¿crees que hemos experimentado algo semejante en México?

El pueblo teme al tirano pero éste teme hasta de sus guardianes. Según esto los millonarios no duermen tan a gusto ni tan a pierna suelta porque cualquiera puede dañarles para quitarles eso que tanto adoran.

Dadme un punto de apoyo y moveré al mundo, con una promesa moveré a la masa.

No puedo vivir sin ti no es una declaración de amor.

Lo que posees te posee, Nietzsche

En cuanto se tiene un martillo todos los problemas empiezan a parecer clavos.

Hay dos ficciones necesarias:

  1. Ciencia ficción teórica corroborada,
  2. Ética ficción práctica justificada.   

Es un libro que obliga a pensar porque no siempre se estará de acuerdo con sus propuestas y eso es parte de lo que le hace más atractivo.

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