Instinto sexual o sexualidad aprendida

Por Francisco Delfín Lara

En contraste con la mayoría de los animales irracionales, los seres humanos nacemos muy desprotegidos, por eso requerimos cuidados de nuestros semejantes durante bastantes años antes de poder sobrevivir de manera independiente. Esa aparente debilidad se constituyó en una fortaleza y por eso nuestra especie es única, pues contamos con la herencia biológica y también con aquella brindada en el lugar donde nos desarrollamos por medio de un proceso denominado  socialización. La cultura es algo que, en teoría, nos distingue de otras especies, no obstante, hay animales que sin duda alguna cuentan con al menos, protocultura; basta recordar los macacos descritos por Kawamura en 1954 en la isla de Koshima. La Mtra. Mito ayudaba a los primatólogos japoneses alimentando a los macacos, cuando observó como la hembra de año y medio denominada Imo, lavaba una papa dulce en un arroyo, pasado un tiempo otros miembros del grupo aprendieron a lavar los tubérculos, pero lo hacían en el mar con lo que adquirió un sabor salado; Kawamara dijo:

“… se pueden observar tres pasos importantes de los fenómenos culturales: aparición, transmisión y modificación

Matzuzawa & McGrew. Llorente, 2015

Se refería a que la mona Imo, vaya UD a saber por qué:

  • 1. Lavó un camote
  • 2. Le enseñó a sus descendientes y vecinos
  • 3. Lavaron los camotes en el mar

Ejemplos como ese abundan, le invito a buscarlos o a compartirlos aquí para seguir aprendiendo.

Que pena, coraje e indignación me dan esas personas dizque civilizadas, incapaces de actuar con responsabilidad, respeto y cordura; las cuales pese a todas las advertencias, incluso de semáforo rojo llenan las calles (García, 2020) y las tiendas porque fueron programadas para gastarse lo que no tienen, al fin que el poder de su firma soluciona cualquier capricho.

Retomando nuestro tema, imaginemos una pareja embarazada, cada uno de los futuros progenitores tiene un proyecto en mente, sobre cómo será la criatura; aunque a veces temerá la existencia de complicaciones que interrumpan el embarazo; una vez superado lo anterior le adjudicarán, al embrión o feto, rasgos propios o de su pareja. Esas personas tienen un proyecto de hijo y por ello, se sienten muy mal cuando nace una criatura, por ejemplo con Síndrome de Down, pues su descendiente no es similar a ellos y se parece a otras personas que no son sus parientes; de una u otra forma han sufrido una herida narcisista, pues sus expectativas fueron borradas de golpe y porrazo.

Pero si la criatura nace sin discapacidad, la persona que primero contacta con ella emite un diagnóstico:

“Es niña” o “Es niño”.

A partir de ese momento se le brinda un trato específico de acuerdo al género asignado. Abundan estudios donde se demuestra que actuamos en automático sin tomar en cuenta, las características propias  del individuo, en el 2011 en ONUMUJERES mencionaron:

“Los estereotipos existen en todas las sociedades: el modo en que percibimos a los demás puede verse determinado por suposiciones simplistas sobre las personas, basadas en caracteres particulares como la raza, el sexo, la edad, etc.”

ONU MUJERES, 2011

Esto se ve muy claro cuando se pide a una persona que describa a una criatura vestida de rosa, por lo general usará palabras como: tierna, dulce, alegre, bonita, adorable y otras por el estilo. En cambio si la misma criatura está vestida de azul, la gente afirma que se ve: fuerte, seguro, inquieto, con carácter, etc.

Reafirmando lo anterior esa criatura recibirá un nombre que, la mayoría de las veces indicará el sexo del individuo, pese a que desde hace unos años se utilizan algunos que pueden ser compartidos. Pero aquí también ocurren cosas curiosas, no es lo mismo llamarse María José que José María y aunque Refugio se usa para hombre o mujer en la cotidianeidad se les dice: Cuca o Cuco, aunque desde Cuco Sánchez ya no conozco a otros ¿UDS si?

Las potencialidades de esa criatura serán reforzadas o limitadas según sea el caso. Todo mundo sabe que las niñas hablan mejor y a una edad más temprana que los varones, pero igual es cierto que las mamás le hablan más a sus hijas que a sus hijos. Los varones, en términos generales, desde el nacimiento son más activos que las niñas y se les brindan juguetes específicos a más de animarles a que realicen juegos exclusivos para ellos. A las niñas se les trata de forma delicada, en cambio a ellos con rudeza. Hasta hace algunos años los niños solían jugar en la calle y las niñas en el interior del hogar pero, actualmente, la violencia tan extendida en nuestro país ha modificado de manera importante lo anterior.

Hasta antes de la pandemia, los niños usaban patinetas, carros, corrían y saltaban por todas partes adquiriendo un mejor manejo de la tercera dimensión a diferencia de las niñas cuyas actividades lúdicas suelen exigir menor pericia, velocidad y desplazamiento. Nunca falta quien dice:

“Por eso las mujeres chocan a cada rato al manejar”

Aunque cabe aclarar que los gastos, tanto en dinero como en vidas humanas son inferiores a cuando el conductor es del sexo masculino.

Recuerdo  que hace años un carro que circulaba con un golpe por demás espectacular en la portezuela trasera izquierda, pero en la puerta del chofer tenía un letrero con letras grandes y rojas que decía: SE LO DIO MI MARIDO. Mujer precavida porque seguramente más de un varón hubiera efectuado comentarios respecto a su impericia.

Sigmund Freud, el creador del Psicoanálisis, que tanto ha influido a nuestra cultura dijo alguna vez

La anatomía es destino *

Sigmund Freud

Sintetizaba en tres palabras su convencimiento de que por el hecho de tener testículos el individuo se sentiría hombre y además desearía relacionarse con mujeres, desde luego lo correspondiente debería suceder con ellas. Años después hemos constatado que alrededor de los dos años de edad la criatura se siente como perteneciente al grupo de los hombres o de las mujeres; la mayoría de las ocasiones el grupo de pertenencia corresponde al de sus genitales. No obstante, también existen personas que pese a tener ovarios se sienten hombres o en el caso de tener testículos se sienten mujeres, a estos individuos se les denomina: Transexuales, y debe quedarnos perfectamente claro que son personas normales.

La cosa se complejiza más porque se nos exigen comportamientos específicos para cada sexo, los cuales fueron aprendidos en la infancia por medio del juego para en la adultez transformarse en algo automático. A los varones se nos educa para resolver problemas y cuando ello se torne difícil se nos anima a gritar o pelear. A las mujeres se les alienta para que desarrollen vocación de servicio, para que se muestren tiernas con sus parientes y den todo por sus seres queridos.

Miedo al placer

El deseo o el apetito sexual forma parte de nuestra existencia y al igual que otros deseos exige satisfacción, lo cual puede conseguirse de diversas formas; algunas son aceptadas y otras prohibidas, no obstante, debe tomarse en cuenta que cuando algo se prohíbe es porque existe.  Por ejemplo para las sociedades occidentales de tradición judeo-cristiana el acto coital estaba indisolublemente ligado a la reproducción y toda conducta sexual que no tuviera ese objetivo (homosexualidad, masturbación, zoofilia) era sancionada, a veces hasta con la muerte. Pero conviene saber que otras sociedades también contribuyeron en esas creencias, por ejemplo, las influencias de los estoicos llevaron a considerar el placer como algo peligroso y evitable si es que se deseaba alcanzar un premio celestial después de la muerte. Seneca dijo:

“El placer es un desfiladero que resbala hacia el dolor si no se pone mesura en él”.

Séneca (4 aC – 65 dC).

Esto todavía se advierte en estos tiempo, quiérase o no, a veces se sataniza el placer y se encomia el sufrimiento.

La estrategia del miedo se usó para disuadir a quienes disfrutaban la actividad sexual que pasó a ser considerada como altamente pecaminosa. Se alababa la inocencia (ignorancia) y se ejercía un control más estrecho sobre la conducta femenina. Durante siglos, una de las estrategias más socorrida ha sido hablar lo menos posible del tema, por eso mucha gente no se atreve a expresar sus dudas y mucho menos sus fantasías si es que se permite hacerlo en su mente.

En la actualidad cuando más 7,000 millones de personas pueblan el planeta, por supuesto en condiciones desiguales, sería ilógico considerar que la gente va, exclusivamente, en pos de la reproducción cuando tiene relaciones coitales. Aunque se molesten algunas almas puritanas, las personas van a los encuentros sexuales por: amor, placer, comunicación, obligación, negocio, la fuerza (lo cual no es aceptable), por cumplir, por necesidad, por quedar bien, porque no hay de otra y muy de vez en cuando para tener descendencia. Si crees que exagero Responde sinceramente ¿cuándo fue la vez más reciente en que tuviste relaciones sexuales, con el fin único y exclusivo de reproducirte?

Un paso al más allá (placer)

Resulta difícil negar el analfabetismo sentimental masculino, nuestro vocabulario para describir los estados de ánimo que experimentamos, es paumpérrimo. Casualmente algo similar sucede con los aspectos eróticos. ¿Será una mera casualidad que el primer pecado, de acuerdo con la Bilblia, haya sido la desobediencia? ¿Tan grave fue la curiosidad y sobre todo el intento de saciarla? ¿Seguimos pensando que ignorancia e inocencia son sinónimos?

Les invito a dudar; a cuestionar lo establecido; a responsabilizarse de todos y cada uno de sus actos; a actuar en forma respetuosa para consigo mismo y para con los demás. Les invito a explorar otras formas de dar y recibir placer, siempre y cuando haya un acuerdo. No se vale decir que se acordó hacer algo con menores de edad, ni tampoco se vale hacer cosas en contra de la voluntad de la otra persona.

Algo que sirve es leer en forma crítica y de preferencia recordar los textos que haya leído, no sea que le pregunten sus tres favoritos. También ayuda el compartir con otros individuos sus experiencias y hacer uso del potencial neuronal con el que contamos. Es tiempo de comportarnos como seres humanos pensantes y no como esclavos mentales incapaces de generar ideas propias.

Hace miles de años el filósosfo de Estagira, Aristóteles (385 – 322) dijo:

Por su naturaleza el hombre es un animal político.

Aristóteles (385 – 322)

Por cierto en una barda, allá por el 68 le agregaron

Y el que no es político es sólo eso: un animal.

Estoy convencido de la validez de sus palabras pero también creo que si a los seres humanos les negamos el Derecho a una Educación Integral de la Sexualidad, lo estamos condenando a la irracionalidad.

Aceptemos humildemente que la gran mayoría de las cuestiones eróticas las desconocemos pero lancémonos con entusiasmo, respeto, alegría, responsabilidad y la mente abierta al aprendizaje de uno de los aspectos más satisfactorios de nuestra existencia… el erotismo. Por cierto, es gratuito y perdura a lo largo de la vida del individuo, es decir, hasta que te mueras, bueno siempre y cuando un necrófilo no se tope con tu cadáver, aunque de seguro ya no disfrutarías.

Y no lo olviden, Oj-Allah pronto volvamos a coincidir.

Bibliografía
  • *Bugacoff Adriana. Primer Encuentro Curioso: “¿Qué hay de nuevo en la Psicopatología, qué hay de nuevo en el Amor?”. Cátedra 2 de Psicopatología de la UBA, CABA, 17. https://www.aacademica.org/primer.encuentro.curioso/2
  • García Alberto. Ambulantaje toma las calles del Centro; Invea contraataca. http://www.cronica.com.mx/notasfamilias_y_comerciantes_aglomeran_calles_del_centro_pese_a_semaforo_rojo-1172848-2020
  • Llorente Miguel. Medio siglo lavando boniatos. Investigación y ciencia. Octubre 2 del 2015.
  • Matzuzawa Tetsuro & McGrew William C. Kinji Imanishi and 60 years of Japanese primatology. Current Biology Vol 18 No 14
  • ONU MUJERES. Cómo contrarrestar la discriminación de género y los estereotipos negativos sobre el género: respuestas de políticas eficaces. Julio 13 del 2011

Usted es la culpable

Por Francisco Delfín Lara

Sugiero no te emociones o como decían los griegos “No te calientes granizo”, pensando que Luis Miguel llegará, sigilosa y silenciosamente a tu lado para cantarte al oído, esa romántica canción compuesta por Gabriel Ruíz Galindo y José Antonio Zorrila Martínez allá por 1951.

Lo lamento, pero en esta casión haré referencia al uso y abuso de esa frase, que durante cientos de años, los miembros de las parejas en todo el mundo, hemos usado para terminar, de manera categórica, tajante pero brutal nuestras desavenencias. Pareciera que el dicho aquel de: “Ver la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio” continúa vigente, pese a que los resultados de esa acción, la inmensa mayoría de las veces, han sido negativos.

Llama la atención que una gran cantidad de parejas se empeñen en reproducir estrategias que lejos de abogar por la recoinciliación, los conduce a terrenos en los que cada cual desea alzarse con la victoria y por consiguiente, donde el otro miembro de la díada sufrirá la derrota. No nos hemos percatado, o nos resistimos a aceptar que cuando se utiliza la estrategia del “Gavilán y la paloma” para dirimir las diferencias, siempre ganará quien la haga de “Gavilán”, pero para el siguiente desacuerdo, nadie querrá ser la “Paloma”.

Considero que reconocer nuestras responsabilidades y usar nuestra creatividad propiciará una mejor convivencia con la persona que elegimos para unirnos, trataré de explicarme.

Dicen que los diamantes son eternos, pero los seres humanos no tanto, y menos si insistimos en desatender las más elementales indicaciones para disminuir los contagios con COVID-19. Más adelante dilucidaremos si es el o la COVID-19. En verdad vale la pena resistir la tentación de reunirse con sus seres queridos, a veces ni tan queridos la verdad sea dicha, pero las costumbres de gastar en pavos, que guisados como sea siempre serán secos, o bacalao “noruego” que recalentado sabe mejor y otras tantas viandas para comer a reventar y quedar mal con alguien porque preferiste ir a cenar con tus suegros en vez de con tus padres, o viceversa, todo eso nos las podemos ahorrar, y así disminuir las probabilidades de contagio.

Yo creo que AMLO se equivocó cuando dijo que nuestro servicios de salud iban a ser como los de Dinamarca, Suecia o Canadá, mejor hubiera dicho que si bien Noruega produce mucho bacalao, en México, Yecapixtla se produce mucha más cecina, si no me lo cree pregunte en cualquier lugar que la sirvan ¿de dónde es esta cecina? de seguro le dirán “de Yecapixtla, MOR”.

Pero retornado al punto en cuestión es importante enfatizar que: La realidad es que sí podemos poner fin a la inercia mencionada al principio de este escrito y, modificar lo que no sirve para inventar otras opciones más amables de convivencia o de resolución de problemas. Debe quedar bien claro que la pareja perfecta y sin problemas es una utopía, es decir, no existe, Martínez afirma:

“Una relación de pareja es un vínculo entre dos personas que se conocen, se encuentran y se unen para formar y desarrollar un proyecto común, y ello lo harán atravesando situaciones de crisis que forman parte del vivir en pareja”

Martínez, 2010

De acuerdo, lo común y corriente es que quienes compartimos la vida con otra persona tengamos desavenencias, pero no por ello deberemos fastidiar, tratar de imponernos o someterla. En varias de mis conferencias he pedido al auditorio que levanten la mano a quienes les gustaría que su vida en pareja fuera como la de sus padres, en muy pocas ocasiones alguien la ha alzado, más bien voltean a mirarse, esbozan una sonrisa cómplice y hasta las colocan bajo sus piernas.

No obstante, la vida en pareja puede resultar menos difícil con un poco de esfuerzo y si es por parte de ambos miembros de la díada, mucho mejor.

Las cosas no son mágicas y ocurren porque alguien las pone en marcha, tiene mucha razón José Carlos Ruiz cuando afirma:

“Se ha impuesto la dictadura de la acción frente a la reflexión”

Ruiz, 2018

Con anterioridad he mencionado que el signo de esta época es la velocidad, y ello a veces produce amargos desenlaces y no hablo sólo de automóviles. Si nos diéramos el tiempo y contáramos con el suficiente valor para analizar, con la mente fría y abierta, la causa de nuestras disputas indudablemente hallaríamos cosas no sólo interesantes sino también impactantes e increíbles.

Si por un momento te abstuvieras de reaccionar como, suele hacerlo la mayoría de la gente en situaciones tensionantes, disminuiría tu tendencia a culpar en automático a tu pareja; y eso, quiérase o no constituiría un gran logro que valdría la pena celebrar pero más que nada, hacer de ello una costumbre.

No obstante, la cosa no es tan sencilla, porque cuando nos molestamos solemos no escuchar, concretándonos a oír y magnificar lo que la otra persona, juzgamos nos arroja con fines destructores. Quienquiera que tenga ese tipo de percepciones se colocará a la defensiva y en la primera oportunidad atacará o como dicen por ahí “se le irá a la yugular”.

La pandemia ha modificado la vida de la mayoría de los habitantes de este planeta, si eres de esas personas que ahí la llevan, pese a todas las contrariedades, sugiero te brindes un momento de tranquilidad y relajamiento, elige un espacio de tu completo gusto y por favor, olvídate de las prisas, por el contrario tomate todo el tiempo necesario para meditar; cuando lo hayas conseguido evoca una discusión reciente, con tu pareja, y plasma en una hoja lo que según tú ocurrió. Luego de anotar tus conclusiones tómate un café y retorna al problema pero ahora: Analiza cuáles fueron tus responsabilidades en los acontecimientos antes descritos. Atrévete a ver tus errores y mírate en el primer plano. Si escarbas a fondo, probablemente, hallarás que muchas de las características achacadas a tu pareja son tuyas, esto es, te pertenecen. Conserva la calma, no eres la única persona a quien eso le sucede y esto no lo digo a manera de consuelo, sino en forma explicativa; nuevamente Ruiz nos confronta:

“… la gente se empeña no tanto en aprender a pensar bien, sino en tener la razón”.

Ruiz, 2018

Pareciera que nos atemoriza sobremanera reconocer nuestros errores, aceptarlos nos hace sentir como si dejáramos de ser valiosos o mejor dicho importantes; por ello hay quien discute para enredar a su pareja, dejarla confundida y alzarse con una pírrica e indignante victoria.

Muchos autores desde hace siglos, insisten en que nos resulta tan, pero tan difícil aceptar nuestros errores que inconscientemente, se los cargamos a los demás, en este caso a nuestra pareja. Actuar de ese modo no sirve para mejorar la relación pues en el fondo, pretendo, suplico, deseo y termino exigiendo, el cambio en la otra persona y no en mí ¿será que me considero un ser inmaculado?.

Gran parte de la tensión que se respira en las relaciones de pareja obedece a que no me satisface la imagen proyectada por la otra persona, y es que suele funcionar a modo de espejo donde se reflejan los rasgos menos aceptados por mi y que inconscientemente, le atribuyo.

Si te atreves a bucear en tu interior podrás encontrar y aceptar que tienes errores dignos de ser corregidos, pero no desesperes si tus cambios no reciben el reconocimiento deseado por ti, pues ante tu diferente manera de reaccionar tu pareja piense que se trate de una trampa. Hace años el biólogo y filósofo von Bertalanffy propuso la existencia de un Sistema general donde todos los organismos interactúan entre si; algo similar acontece entre nosotros, pues el más pequeño cambio en mí afectará a mi pareja y a nuestro entorno, así que calma; no por nada los chinos decían que el origen del tifón era el aleteo de una mariposa al otro lado del océano.

Cuando alguien comienza a cambiar es probable que su pareja le imite, pero si las peleas y desaguisados no sólo persisten sino que cada vez suben más de tono, es recomendable solicitar ayuda profesional.

Todo lo que aquí expuesto son sólo ideas que te invito a considerar para reflexionar sobre ellas. Creo que podríamos imitar a las vacas, ellas comen, comen pasto y yerbas, bueno me refiero a las que viven en rancherías alejadas de la alimentación inventada para ellas. Después de ramonear varias horas, se sientan, fijan la mirada en el infinito y regurgitan parte de lo que “comieron”, para volverlo a masticar y luego una vez formado el bolo alimenticio será digerido, y por tanto absorvido. Algo así puedes hacer, escuchas esto por ejemplo y, algunas ideas surcarán distintos caminos en tu mente, finalizado el Podcast harás otras cosas. Pero más tarde quizá te sientes a re-flexionar lo escuchado, añadiendo otros elementos frutos de tu experiencia. Un diálogo surgirá de tu interior y producto de ello decidirás qué hacer al respecto, usando tanto tu libertad como tu responsabilidad. Aquí no se trata de imponer ideas o emitir mandamientos, mi pretensión es invitar a pensar y si después te equivocas tendrás oportunidad de enemendar tus errores, pero lo que puedo asegurarte es que algo habrás aprendido.

Y no lo olviden, Oj-Allah pronto volvamos a coincidir.

Bibliografía:
  • Martínez Sánz Rosa. Claves para la intervención psicoterapéutica en la pareja. Información Psicológica No. 98. Abril 2010:33
  • Ruiz José Carlos. El arte de pensar. Cómo los grandes filósofos pueden estimular nuestro pensamiento crítico. Editorial Berenice. 2018.

Falta de orgasmo femenino o Anorgasmia

Por Francisco Delfín Lara

Una tarde mientras visitaba una vieja librería, me topé con un voluminoso libro titulado: Todo lo que los hombres saben sobre la sexualidad femenina, ante nombre tan atractivo, decidí revisar la bibliografía, para darme una idea de la seriedad de la obra; retiré el papel que recubría al mamotreto y para mi sorpresa… todas las páginas estaban en blanco. Me pareció una broma muy ingeniosa, a más de confrontadora. El desconocimiento del erotismo femenino es inmenso, pero no exclusivo de los varones y por ello, conviene reflexionar en torno a lo dicho por la psiquiatra y terapeuta sexual de Nueva York, Offit:

… algunas argumentan que lo que una persona ignora no puede hacerle daño, pero cuando la ignorancia es privación raras veces conduce a la felicidad .

Offit

Ese desconocimiento suele estar estrechamente relacionado con que en nuestra sociedad el erotismo femenino está menos explorado que el masculino.

¿Qué tanto es tantito?

Mark Twain decía:

“hay tres clases de mentiras Las mentiritas,
las mentirotas y las estadísticas”

Mark Twain

Suena simpático e ingenioso pero piensen cuánto tendrán de verdad, Tantas encuestas sobre curas milagrosas para el COVID-19,  muchas lucen como creadas para lograr los resultados al gusto del cliente. Por lo que hace a nuestro tópico los datos nos permiten visualizar la punta del iceberg. Heiman señaló que en una encuesta a nivel nacional en Estados Unidos 24% de las mujeres afirmaron ser  incapaces de alcanzar el orgasmo, ni es para tanto dirán algunos, aunque es algo así como una de cada cuatro mujeres (Heiman, 1997).

No hay mujeres frígidas, sino malos amantes.

Todavía hay quienes al emitir esa sentencia, adoptan una pose de mucho mundo, evidencia de que jamás le rascaron un poco y por ello no descubrieron en el fondo, inmensas dosis de machismo y hembrismo pues, sigue depositando en el varón la responsabilidad del disfrute femenino y ella continúa con su papel de pasividad; pero no sólo eso pues como afirma Fisher, uno de los primeros investigadores de este tema: .

.. la mujer que experimenta dificultades orgásmicas está interiormente más preocupada por el carácter inseguro y no confiable de sus relaciones.

Fisher, 1987

Tiene razón en parte, porque son muchos los pensamientos intrusivos que llegan a la mente de ella, impidiéndole liberarse y priorizar sus sensaciones placenteras.

¿Pura o ignorante?

En el juego de los estereotipos, al menos en el mundo occidental, se supone que el hombre debe ser el: Sexperto, algo así como: Sabérselas, de todas, en el terreno erótico; en cambio a ella se le educa para carecer de ese tipo de conocimientos, es decir, se encomia la ignorancia sexual nombrándola como Pureza.

Mutilación mental.

En estas tierras no se practica la mutilación femenina, eufemísticamente denominada circuncisión,  por medio de la cual se extirpa el clítoris, sin embargo, la sofisticación es tal que una gran cantidad de mujeres no llega al clímax pese a que en las féminas, la multiorgasmia es más frecuente que en los varones. Dado el temor a su gran potencial erótico, los hombres, desde tiempos inmemoriales, idearon un sin fin de estrategias para reprimirlas, manipularlas y a final de cuentas controlarlas.

Orgasmo vaginal vs. Clitorídeo.

La obra de Sigmund Freud, lo mismo que la de Karl Marx y la Biblia padecen de lo mismo, todo mundo les menciona, pero casi nadie les ha leído, y mucho menos a profundidad. El creador del psicoanálisis puso una gran cantidad de temas sobre la mesa y desde entonces hubo desacuerdos para con sus teorías; él mismo, a lo largo de su existencia modificó muchas de sus afirmaciones. Le tocó vivir en plena Época Victoriana y eso se nota en gran parte de su obra:

  1. Afirmaba que el clítoris era una especie de pene atrofiado. 
  2. Sentenció que sólo podían llegar a ser psicoanalistas aquellas mujeres que aceptaran su: Envidia del pene. Aquí entre nos, ese tipo de envidia, lo padecen más los varones que las mujeres.
  3. Dijo que los orgasmos clitorídeos eran propios de féminas no maduras, en lo emocional. Según él, lo ideal era obtenerlo sólo con estimulación vaginal. Una gran cantidad de sus seguidores, más Freudianos, que él mismo, intentaron curar y más bien fastidiaron a quienes estaban en esa situación. Fue hasta 1966, cuando Masters y Johnson señalaron que el orgasmo era una reflejo, al cual se accedía luego de rebasar cierto umbral de excitación, eso se conseguía estimulando diferentes partes del cuerpo, pero en especial al clítoris. Si bien, una de cada cuatro féminas alcanza el acmé sexual con sólo el coito, 75% de las restantes requiere de algún tipo de estimulación clitorídea para llegar al orgasmo.

… necesita una pintadita el techo.

El análisis de los chistes nos conecta con creencias populares, las cuales, suelen ser producto de la observación, como en este caso donde a ella se le nota desconectada, poco participativa y a todas luces, sin disfrutar; multitud de pensamientos intrusivos le distraen y evitan se concentre en sus sensaciones. Esa facilidad, o maldición para pensar en tantas cosas le impide entregarse a su intimidad y por ello le resulta imposible abandonarse a su placer..

Y ahora resulta …

Abundan las mujeres que no sólo se la pasan mal por padecer anorgasmia sino porque su pareja les echa en cara no llegar al orgasmo. Esos varones no se preocupan por ellas, la anorgasmia, la interpretan como una afrenta a su masculinidad.

Causas.

Gran cantidad de autores asegura que son más fáciles de resolver las anorgasmias primarias, aquellas en que nunca se ha tenido un orgasmo y agregan que están estrechamente relacionadas con educación represiva, por ejemplo, el regaño infringido a la niña que se masturbaba, la condicionó a considerar como pecaminoso todo aquello vinculado con su erotismo.

Algunas mujeres, al percatarse de su incapacidad para culminar el encuentro sexual  y por temor de molestar o defraudar a su pareja, se preocupan a tal grado que intentan por todos los medios excitarse y llegar al orgasmo, lo que les lleva a estar al pendiente de todos sus cambios corporales, esa actitud, conocida como Auto-observación, lejos de ayudarles, garantiza que persista la disfunción.

La anorgasmia secundaria, aquella en la que dejan de tener orgasmos, con gran frecuencia aparece en quienes padecen: esclerosis múltiple; esclerosis lateral amiotrófica; neuropatía alcohólica, desnutrición grave y diabetes mellitus. Respecto a este último padecimiento y por su alta frecuencia en nuestro país es indispensable considerar lo afirmado a finales del siglo pasado por Masters, Johnson y Kolodny, afirmaron que no se trata de una problemática definitiva, pues puede superarse al proporcionar una estimulación más intensa y variada.

Pero, la anorgasmia, también puede ser causada por medicamentos.

Los problemas de pareja están a la orden del día y abundan los casos en los que ella accede a tener relaciones, más por obligación que por Motu propio.

Infinidad de mujeres fingieron no sólo que disfrutaban el encuentro sexual sino que llegaban al orgasmo, todo con el fin de que, él no se molestara, pero ¿Será que esto ya no sucede? ¿Se sentirán ellas con la libertad de expresar sus insatisfacciones? ¿Serán ellos capaces de empatizar con su pareja y buscar soluciones?

Erotismo cortado a la medida.

Aunque existen mujeres, capaces de disfrutar la cópula pese a no llegar al orgasmo, cada día son más las que anhelan soluciones efectivas y en vista de que las causas son muy variables lo son también las propuestas terapéuticas.

Vale la pena tener presente que si bien el varón puede contribuir con su desempeño al disfrute femenino, a final de cuentas será ella quien deba permitirse gozar; realizando algunas actividades consigo misma entre las que destacan, minuciosas exploraciones de su cuerpo y el autoerotismo, porque como dijo Shere Hite:

… La forma que tienen las mujeres de alcanzar el orgasmo es algo que debe celebrarse, no criticarse (43).

Shere Hite

Totalmente de acuerdo, igual significa reconocer su derecho a decirle a su pareja la manera en que desea ser acariciada para lograr una mayor excitación. Investigaciones más recientes confirman o refuerzan lo anterior, aunque la mayoría de las mujeres puede alcanzar el orgasmo por medio de la masturbación, el orgasmo durante la actividad de pareja, es menos frecuente y constante; esto invita a investigar tanto el comportamiento como la habilidad de su pareja (Kingsberg et al, 2017).

Definitivamente, la terapia sexual funciona pero es conveniente asesorar a la mujer para valorar sus avances, y erradicar un sin fin de falacias en torno a como se siente un orgasmo pues la gente suele crearse falsas expectativas, Woody Allen alguna vez comentó:

Hasta el más malo de mis orgasmos es sensacional.

Woody Allen

Esto viene a colación porque algunas mujeres buscan compulsivamente, una experiencia que las deje en calidad de cadáver.

Algo que ayuda a no conseguir el orgasmo, es aferrarse con lograrlo o perseguirlo obsesivamente.

Es preferible ir al encuentro sexo-erótico con la finalidad de dar y recibir placer, sin prisa, disfrutanto el ambiente, la compañía, jugando con los cuerpos y permitiendo que los sentidos se pongan en práctica sin exigencias; actuar de ese modo se constituye en una de las mejores estrategias para disfrutar.

Y no lo olviden, Oj-Allah pronto volvamos a coincidir.

Bibliografía:
  • Delfín, Lara, Francisco. No más mentiras en: Sexo populi. Editorial Norma. México, 2004. Páginas: 85-93.
  • Fisher, Seymour. Estudio sobre el orgasmo femenino. Editorial Grijalbo. España, 1978.
  • Heiman, Julia, R. Y Lopiccolo, Joseph. Para alcanzar el orgasmo. Un programa de crecimiento sexual y personal para la mujer. Editorial Grijalbo. México, 1989.
  • Heiman, Julia and Meston, Cindy, M. Empirically Validated Treatment for Sexual Dysfunction. Annual Review of Sex Research. 1997.
  • Hite, Shere. Teorías sobre la sexualidad humana. El orgasmo femenino. Ediciones B. España, 2002.
  • Kaplan, Helen, S. La evaluación global de las disfunciones sexuales, en: Evaluación de los trastornos sexuales. Aspectos médicos y psicológicos. Editorial Grijalbo. España, 1985. Páginas: 303-322.
  • Kingsberg S., Althof S., Simon J., Bradford A., BitzerJ., Carvalho J., Flynn K., Nappi R., Reese J., Rezaee R., Schover L., Shifrin J. Female Sexual Dysfunction—Medical and Psychological Treatments, Committee 14. J Sex Med 2017;14:1463e1491
  • Offit, Avodah, K. Las enfermedades femeninas, en: El Yo Sexual. Editorial Grijalbo. España, 1978. Páginas: 166-209

Celos ¿Y te acostaste con él? ¿Y la amas?

Por Francisco Delfín Lara

¿Por qué los cuestionamientos  son planteados de acuerdo al sexo?, sobran las hipótesis pero, no sólo por parte de cualquier mortal (que en estos tiempos tenemos más probabilidades de serlo pese a lo dicho por nuestras autoridades, incluso las sanitarias) si no que también estas preguntas las han suscrito especialistas de diversas nacionalidades.

Hera la tercera esposa de Zeus que por cierto era su hermana mayor, fue una celosa empedernida aunque el jefe supremo del Olimpo le daba motivos para ello pues como se dice en México

Le tiraba a todo lo que se movía

La forma como Hera usaba su poder para castigar a algunas de las conquistas de su olímpico cónyuge son dignas de analizar porque, con gran frecuencia se excedía, aunque cabe preguntarse ¿por qué seguía con Zeus?

Agustín de Hipona (354-430) cuya vida está colmada de episodios amorosos (Remember Flora Emilia) comentó:

El que no está celoso no está enamorado.

Agustín de Hipona

Mi tía Canuta le decía a mis hermanas:

Si te ama es porque te cela.

La tía Canuta

Moraleja, los celos aumentan la calidad del amor pero, cuidado porque ante su inexistencia habrá quien se lamente de que no le aman lo suficiente.

Quizá conozcamos a personas que se hayan sentido bien cuando fueron celadas, pero cuando la conducta extra-ordinaria se convertía en consuetudinaria las cosas se transformaban en martirio. ¿Han escuchado?:

No me molesta que salgas con tus amigos, confío en ti ciegamente pero, de ellos no me fío ni tantito.

Según este individuo, ella puede ser manipulada por cualquiera.El celoso al sentirse herido, desconfía de todos y más de su pareja, lo que ella haga causa sospechas y por eso diseñará estrategias para controlarla aunque, él también quede controlado. Para complicar más el asunto Proust sentenció:

Nada podemos saber de los seres a los que amamos.

Proust

Pero el celoso no se rendirá, e  intentará conocer todos los pensamientos de su pareja los actuales y futuros pero sobretodo los pasados. Lo que encuentre lo acomodará para corroborar sus hipótesis, para revolcarse en su dolor y sentirse con el derecho de satisfacer sus ánimos vindicativos. De modo que si tu pareja inquiere acerca de tus experiencias pasadas, considera lo que me comentó un consultante:

“Cuando se empieza a hablar sobre las relaciones anteriores prefiero no preguntar porque después duele y si me preguntan no respondo, porque después no olvidan”

Cuidado  con quien comente: “sólo necesito saber unas cuantas cosas más y luego asunto olvidado:

  • Él: ¿cuántas veces tuvieron relaciones? ¿cuántas orgasmos tuviste con él? ¿fue mejor amante que yo?
  • Ella: ¿te sientes más feliz con ella? ¿qué le has contado de mi? ¿y la amas?

Existen personas que propositivamente, provocan celos en su pareja o dicho de manera más popular Les dan picones, pero las cosas pueden salirse de control y producir resultados indeseados.

Hubo quienes mencionaron que, lo mismo que machos de otras especies, el celoso está interesado en garantizar que la descendencia sea suya; y aunque los humanos solemos considerarnos como el Acmé de la creación  seguimos enfrentándonos a una realidad apabullante: la difícil tarea de demostrar la paternidad. Ella jamás dudará de su maternidad, quizá por eso siga vigente la respuesta que un profesor le dio al alumno que preguntó:

Profesor ¿cuál es la diferencia entre fe y ciencia?

Verá UD -dijo el viejo profesor- la fe es un conjunto de creencias que no exigen comprobación; por otro lado la ciencia se refiere a conocimientos obtenidos luego de profundas y sesudas observaciones, las cuales son sometidas al análisis y a la reflexión, es decir, se trata de algo objetivo. De modo que cuando UD señala a una mujer y nos dice “Esa es mi madre” eso es ciencia; en cambio cuando UD señala a un hombre y nos dice “Ese es mi padre”, debo decirle querido alumno, que eso es FE.

Levy y Kelly, hablan de la existencia de hombres que al igual que la mayoría de las mujeres, consideran que la traición emocional es más dolorosa que la infidelidad sexual (4). Aunque UD no lo crea.

La mayoría de las personas habla de una situación triangular en el caso de los celos, pero Davis afirma que es como un cuadrado: celoso, celado, rival y cultura (5). La observación es muy interesante porque deja ver que, la sociedad en la que crecimos, nos enseña que sentir y como comportarnos.

Después de experimentar los celos se ha observado:

  1. La existencia de más violencia contra la pareja que contra el rival y esa violencia puede alcanzar tintes muy altos que pueden llegar incluso al homicidio o al suicidio.
  2. Que ellas se culpen puede deberse a que, tradicionalmente se les ha responsabilizado  de que el matrimonio navegue por aguas tranquilas.
  3. Ellos culpan a la pareja o al rival, es decir, se colocan en calidad de víctimas.
  4. Es más factible que ellas acepten estar celosas; al varón le cuesta trabajo hacerlo, quizá porque sería una especie de reconocimiento de inferioridad o de debilidad.

Para rematar Armando Chulak define al bígamo como:

“una especie de ciervo doble”.

Armando Chulak

El celoso hace sufrir y sufre, pues suele colocarse por debajo de cualquier rival, en su mente su pareja se fijará en cualquier persona y teme que todos le superen.

“La Rochefoucauld” (1613-1680) comentaba respecto a los celos:

Nacen más bien del amor a si mismo que del amor a otros.

“La Rochefoucauld” (1613-1680)

Esto es, me niego a perder a alguien que considero de mi estricta propiedad, alguien para quien yo debiera ser su todo; la herida narcisista  es brutal. Por eso Alberoni advierte:

Estamos celosos sólo cuando es la misma persona a la que amamos la que se deja raptar, seducir, llevar por otro, cuando lo prefiere a él en vez de a nosotros. Los celos son siempre traición de la exclusividad. (6)

El golpe a la autoestima es demoledor, resulta difícil aceptar que quiera irse de nuestro lado, se juzga como la máxima traición aunque jamás se haya hablado de exclusividad y aunque el celoso en alguna ocasión haya sido infiel pues dirá:

Alberoni

Lo mío fue distinto, yo no amaba a la otra persona, sólo fue un arrebato pasional.

El celoso dispone de una ingente cantidad de racionalizaciones para justificar sus actos.

Los celos puede experimentarlos cualquier persona, por ello conviene reflexionar en lo dicho por Clanton y Smith:

Lo que determina si nuestros celos son
<<normales>> o <<anormales>>,
<<sanos>> o <<patológicos>>
no es este <<chispazo>> en sí, sino
lo que hacemos con él (8).

Clanton y Smith

Cuando el barreno de los celos comienza a penetrar nuestra autoestima, valdría la pena hacer un alto en el camino y analizar

¿qué tan cierto será esto que experimento; que me hace sospechar y temer que mi pareja está interesada en otra persona? Quizá todo se deba a un mal entendido.

Sin embargo, si esto me ha ocurrido en varias ocasiones quizá sea tiempo de dejar de sufrir y solicitar ayuda profesional.

Tüllmann, un estudioso de sociedades no industrializadas afirmaba:

Aún entre nosotros, los celos pueden explicarse casi exclusivamente como debidos sobretodo al deseo de poseer en derecho a la persona que nos los provoca (10).

Tüllmann

La realidad es que lo único que poseo es mi forma de reaccionar; mi pareja es otra persona que acepta estar conmigo y lo hace por razones, como:

le gusto, le agrada mi forma de ser, compartimos sueños, se siente segura a mi lado y lo ideal sería permanecer de este modo hasta que ambos queramos hacerlo, por tanto, podría modificarse aquello de que se casan

Hasta que la muerte los separe por Hasta que la muerte del amor los separe.

Ortega y Gasset decía:

Yo soy yo y mi circunstancia
y si no la salvo a ella no me salvo yo.

Ortega y Gasset

El celoso percibe algo (real o imaginario) que su pensamiento acrecienta y lo introduce en una dinámica de la cual resulta, sumamente difícil escapar pero que también se constituye como una oportunidad para templarse y actuar con sobriedad; no hay un determinismo que nos lleve a realizar, en automático lo mismo a hombres y mujeres; cada uno elige quiéralo o no lo que hará, quizá por eso Tördjman define a los celos como:

Encuentro entre una estructura y una coyuntura. (11).

Tördjman

Esos sentimientos surgen en un ambiente que ha influido desde la más tierna infancia, en la mente del individuo; esa persona tiene una constitución concreta, de modo que de esa mezcla emerge una persona específica; las combinaciones pueden ser infinitas, lo mismo que los comportamientos aunque conservamos en la memoria, preferentemente aquellos que resultan más dramáticos como el del pintor Juan Pablo Castel ese personaje, sin par que Ernesto Sabato retrató de forma magistral en su novela El túnel, la cual vale la pena leer.

Cano y colaboradores comentaron:

Ponerse alerta ante la percepción de una posible amenaza sería una respuesta adaptativa, pero la intensidad de la reacción, la conducta percibida como amenazante, las respuestas permitidas y las emociones asociadas serían prescritas socialmente. (12).

Cano y colaboradores

Por supuesto que reaccionaremos ante todo aquello que atente o creamos que atente contra nuestra relación, pero tras un momento de calma sería interesante averiguar que tanto encaja en mi lo dicho por May (no digo su nombre para que no piensen que es puro rollo):

¿Por qué estoy tan bajo de autoestima?

May

Nos sentiremos mejor cuando aceptemos que:

Mi sensación de seguridad y confiabilidad hacia mi pareja más que estar, estrechamente relacionada con mi confianza en mí mismo, emana de esto último.

Y no lo olviden, Oj-Allah pronto volvamos a coincidir.

Bibliografía:
  1. White, Greg, citado por Ayala, Malach, Pines. Aprender a manejar los celos. Inteligencia emocional. http://www.inteligencia-emocional.org/cursos-gratis/celos/index.htm
  2. Bringle y Buunk, citados por Reidl, Martínez, Lucy, Ma. Celos y envidia: emociones humanas. Colección Postgrado UNAM, 2005:119.
  3. Fisher, Helen. El primer sexo. Las capacidades innatas de las mujeres y cómo están cambiando el mundo. Editorial Taurus. España, 2000:331
  4. New explanation for sex differences in jealousy. The Free Library. http://www.thefreelibrary.com
  5. Reidl, Martínez, Lucy, María. Celos y envidia: emociones humanas. Colección Postgrado UNAM, 2005
  6. Alberoni, Francesco. Te amo. Editorial Gedisa. España, 1997:100
  7. Pasini, Willy. Los nuevos comportamientos amorosos. La pareja y las transgresiones sexuales. Editorial Grijalbo. España, 2005:239
  8. Clanton, G. y Smith, L.G. Anatomía de los celos. Editorial Grijalbo. España, 1981:24.
  9. Ayala, Malach, Pines. Aprender a manejar los celos. Inteligencia emocional. http://www.inteligencia-emocional.org/cursos-gratis/celos/index.htm
  10. Tüllmann, Adolf. Vida amorosa de los pueblos naturales. Editorial Círculo de Lectores. España, 1971:142
  11. Tordjman, Gilbert. (1988). La pareja. Editorial Grijalbo. México:279
  12. Canto, O.J.M.; García, L.P. y Gómez, J.L. Celos y emociones: factores de la relación de pareja en la reacción ante la infidelidad. Athenea Digital. No. 15:51

Cíclopes y COVID-19

Por Francisco Delfín Lara

Una de los efectos más llamativos de la pandemia del COVID-19 es el impresionante aumento de “Cíclopes” en todo el mundo; la gente afirmaba que esta especie ya no existía, que la última noticia sobre ellas la proporcionó Homero cuando describió como Odiseo venció al gigante Polifemo. Y aunque tienen razón quienes dicen que estos seres sólo existieron en la Mitología, en especial la griega, a mí me parece que una subespecie se ha multiplicado de forma exponencial en estos tiempos de confinamiento.

Me explico, chequen y verán como por doquier, brotan supuestos expertos que hablan (o escriben) sin ton ni son sobre los orígenes, la evolución, las consecuencias, las desventajas para unos, las conveniencias para otros, sobre las vacunas más efectivas, el tratamiento del momento y un sin fin de temas más, relacionados con el COVID-19. Lo peor es que casi ninguna de esas personas tiene información de primera mano, sin embargo, hablan con más autoridad que cualquier presidente que vaya de salida en un país al norte del nuestro. Cuanta razón tuvo aquel que dijo

“El que no conoce a dios, a cualquier barbón se le hinca”.

La penetración de Internet facilita que notas de todo tipo inunden las plataformas, donde una gran cantidad de gente ávida de noticias (falsas o no), las consume y las re-envía causando daños considerables, al seguir las sugerencias del tipo

“inyectar desinfectante para limpiar
los pulmones de los pacientes”

La Vanguardia, 2020

Si te parece absurdo e ilógico te comento que varias personas fueron internadas en el vecino país del norte por haber puesto eso en práctica. Hoy más que nunca valdría la pena que fuéramos capaces de analizar las noticias, con seriedad, revisar quién (en verdad) la publicó, analizar si la fuente es de confianza, pues puede ser falsa, conviene atreverse a ver panorámicamente, con ambos ojos y no sólo con aquel enfocado a prejuicios.

Considero indispensable citar el “Efecto Dunning-Kruger”, este par de investigadores habló del Sesgo cognitivo, el cual hace referencia a individuos con conocimientos limitados que se sienten más inteligentes que otros, es decir, no saben que no saben. Y de Individuos muy bien preparados que subestiman sus conocimientos.  Si UD lo piensa con cuidado, se dará cuenta de que esto es más frecuente de lo deseable. Por cierto el Dir. Gral. de la OMS dijo el 16 de noviembre de 2020:

“No tenemos excusa para no actuar. Quiero transmitirles un mensaje muy claro: actúen ahora, con rapidez y determinación”

OMS, 2020

Pero ¿y de la sexualidad qué?

Hay muchas cosas en esta pandemia sobre las que vale la pena reflexionar, pues el encierro va para largo, por distintos motivos entre los que sobresale, esa extraña manía de no tomar en serio las medidas sugeridas por las autoridades sanitarias.

Dado que el confinamiento impacta de diferente manera a la gente, deben considerarse infinidad de aspectos, por ejemplo, si la persona vive sola, o si en familia, cuántas personas componen esa familia, qué edades tienen.

Qué tipo de vivienda habitan, es decir, ¿hay espacio suficiente o es reducido? ¿cuenta con los servicios indispensables?

¿Los ingresos son los mismos que antes del encierro o decayeron porque le rebajaron el sueldo o peor aun le despidieron?

Si trabaja desde casa ¿tiene los recursos para hacerlo bien y con comodidad? ¿estaba preparado para usar computadoras o va aprendiendo de a poco? 

Hablando de parejas ¿cómo se sienten si tienen que pasar todo el tiempo juntos? ¿cómo se distribuyen las tareas domésticas?

Es innegable que los conflictos son inherentes a los seres vivos y en especial a los humanos, más aun cuando se vive en situaciones de confinamiento.

Antes de abordar los aspectos erótico/sexuales, te invito a reflexionar y recordar qué tanto ha modificado la pandemia/encierro, tu vida.

Ya que lo tengas en mente compáralo con datos de investigaciones que si bien fueron realizadas en otros países pueden ser útiles:

  1. En Italia hicieron una encuesta a 4,177 mujeres y a 2,644 hombres. Hallaron que antes de la pandemia 3,428 personas tenían relaciones sexuales pero durante el encierro sólo 785 las seguían teniendo, esto habla de una baja considerable, y como premio de consolación o de crueldad o más bien de realidad, dijeron que quienes siguieron teniendo relaciones sexuales tenían menos angustia. Los investigadores mencionan algo que se intuía, que el encierro afecta la salud sexual por la angustia de la cuarentena y la imposibilidad de estar con su pareja. Hallaron más sintomatología ansioso/depresiva y más disfunciones sexuales en quienes tuvieron relaciones sexuales con menor frecuencia. La moraleja es una frecuencia de relaciones sexuales de regular a alta disminuye los síntomas depresivos y de ansiedad. (Malaioli, 2020).
  2. En otra investigación italiana participaron 89 mujeres de 28 a 50 años. Antes de la pandemia las 89 mujeres tenían relaciones coitales, durante la pandemia la cifra bajó a 52. Pero ojo, disminuyó más la frecuencia en las que trabajaban fuera de casa y con mayor grado de escolaridad, como si les preocupara la probabilidad de contagiar a su pareja. Señalaron que la presencia de niños en casa, influye negativamente en el erotismo de la pareja. (Schiavi et al, 2020). Esto último lo sabe cualquiera que ha sido bendecido con chamacos; si la pareja cree que podrá intimar cuando se duerman las criaturas, no ha tomado en cuenta que si tienen celular, tableta y/o computadora los angelitos por no decir “desgraciados” permanecerán despiertos hasta altas horas de la noche. Algunas parejas han optado por aprovechar los viernes, se van a su recámara, la cierran y ponen en el seguro en la puerta. Prenden la TV, le suben el volumen y… Quienes están afuera de seguro dicen: “Es viernes, mis papás se metieron a la recámara, pusieron el seguro, prendieron la TV y si le subieron el volumen es que de seguro copularán”. Es lógico y no es malo, la descendencia pensará que sus progenitores, se gustan, se atraen, se divierten y en una de esas hasta se quieren.
  3. Arafat et al, informaron que de una muestra de 120 personas de Bangladesh, India y Nepal, 72.5% tuvo de 1 a 5 relaciones por semana, algo así como 3.3% de aumento en comparación con lo sucedido antes de la confinación y 50% informó de cambios positivos en los vínculos emocionales. Advierten que la intimidad puede incrementarse y que la comunicación puede mejorar. Eso suena muy bien, sin embargo, en la encuesta sólo participaron personas que tenían un inglés fluido, graduados o postgraduados, con empleo y casados que vivían juntos, es decir, que no representaban a sus respectivos países, o dicho de otra forma fue una muestra sesgada.
  4. Una preocupación no siempre externada es la relacionada con el Material pornográfico. ¿Será que los consumidores se harán adictos al sexo? Será que ¿sólo atraerá a los jóvenes? o ¿a los menores de edad también? ¿y los adultos? ¿y los abuelos? Como dato curioso les cuento que en mis años mozos las revistas pornográficas se escondían abajo del colchón o en los rincones más profundos del clóset, aunque igual podíamos visitar, al taller mecánico más cercano, pues sus paredes estaban llenas de fotos de mujeres con poca ropa. ante la dificultad de contar con respuestas exactas, revisaremos unas cifras. Por ejemplo, OnlyFans es una red que cuenta con 60 millones de usuarios y 750,000 creadores, estos últimos son personas que fabrican su video, lo suben al sitio, le ponen precio y confían en que resulte atractivo para gente capaz de pagar por verlo y recomendarlo. PornoHub es el sitio de pornografía más grande en la red, funciona de manera similar al anterior, y reportaron que en la pandemia han tenido crecimientos hasta de 17% diario. Una de las mayores preocupaciones gira en torno al tipo de material que se comercializa, pues pueden variar desde desnudos parciales hasta escenas de violencia real. VivexTv es una plataforma que enfatiza no permite el acceso a menores de edad, que no comercializa datos de los usuarios y propone porno sin escenas violentas contra la mujer (Lacasa, 2020). Suena un poco más esperanzador.   

¿Qué opciones existen para tratar de pasarla bien desde el punto de vista erótico/sexual? Lanzo la pregunta al aire y me fascinaría leer sus respuestas, ideas o sugerencias, pero igual puedo decir que, tantas como tu imaginación te permita, y lo acuerdes con tu pareja en el caso de tenerla.

Si no tienes pareja ¿cuántas actividades sexuales excitantes puedes practicar sin entrar en contacto físico con otra persona? Seguramente abundará gente que hablando con el lenguaje de los abogados dirá “Me haré justicia por mano propia” o que recordando a Henry Havellock Ellis prefiera decir que recurrirá al “Autoerotismo”. Se trata de una actividad practicada por la mayoría de hombres y mujeres que no causa daño alguno.

Para cumplir con el espíritu de este Blog, sugiero no creas ni siquiera esto que has escuchado, tómalo como una invitación a dudar, analizar, reflexionar y tomar decisiones de forma responsable.

Y no lo olviden, Oj-Allah pronto volvamos a coincidir.

Bibliografía:
  • Gerson Lopes., Fabiene Castro, Isabela Vieira, Agnaldo Lopes da Silva, Catarina Abuhid e Sel,o Geber. COVID‑19 and Sexuality: Reinventing Intimacy. Archives of Sexual Behavior (2020) 49:2735–2738 https://doi.org/10.1007/s10508-020-01796-7
  • Lacasa Blanca. El fenómeno OnlyFans: ¿ha salvado el porno o lo ha convertido en el nuevo Uber? ICON, noviembre 8 del 2020.
  • https://www.lavanguardia.com/internacional/20200424/48691995298/donald-trump-desinfectante-luz-enfermos-covid-19-coronavirus.html
  • Malaioli D. , Sansone A- Ciocca G., Limoncin E., Colonnello E., Di Lorenzo G., Jannjni E. Benefits of sexual activity on psychological, relational and sexual health during the COVID-19 breakout. https://doi.org/10.1016/j.jsxm.2020.10.008
  • OMS. Alocución de apertura del Director General de la OMS en la rueda de prensa sobre la COVID-19 del 16 de noviembre de 2020.
  • Schiavai et al. Love in the Time of COVID-19: Sexual Function and Quality of Life Analysis During the Social Distancing Measures in a Group of Italian Reproductive-Age Women  J Sex Med 2020;17:1407e1413

Fetichismo

Por Francisco Delfín Lara

Para una gran cantidad de personas este término evoca al individuo que subrepticia y sigilosamente se desplaza por las azoteas robando ropa interior femenina para masturbarse en su casa, donde vive solo pues es incapaz de relacionarse. Lo anterior es fácil de decir, pero difícil de comprobar porque casi nadie sabe donde ponen a secar su ropa interior las mujeres.

Para las mentes conservadoras solazadas en tratar de controlar el comportamiento ajeno, el ejemplo anterior, sin forzosamente poder generalizarse, se convierte en la perfecta excusa para despotricar contra todo aquello que no se realice como ellas determinan, señalan, advierten u ordenan.

Sin embargo, vale la pena comenzar el análisis del tema desde el principio.

En primera instancia se dice que esta palabra proviene del portugués “Feitiço” cuyo significado es “hechizo”; apareció en francés allá por 1757 por parte de Charles de Brosses (1). Esta propuesta es muy de mi agrado, porque el fetichista queda hechizado, encantado o cautivado con un determinado objeto confiriéndole significados especiales y por tanto muy personales.

Durante mucho tiempo a conductas de este tipo se les consideró como aberraciones, perversiones o desviaciones, basta con leer “Psicopatía sexual” (1886) de Richard von Kraft-Ebing, autor para el cual el acto sexual debía estar encaminado hacia la reproducción, cuando ese no era el propósito principal los individuos recibían tales calificativos. Visto con cuidado dichos conceptos más que descriptivos resultaban valorativos, esto es valoraban negativamente tales conductas.

Freud, atinadamente, señaló que la conducta sexual infantil era polimorfa y perversa; lo de poliforma hacía alusión a que son muy variadas las formas de expresión, y lo de perverso hacía referencia a que fuese cual fuese el comportamiento no llevaría a la reproducción. Hasta ahí todo estaba bien, el problema surgió cuando se generalizó, que el fin de todo encuentro sexual debía ser la reproducción. La Biblia lo menciona, si una religión propone tales mandatos a sus seguidores está en todo su derecho, el problema emergió cuando un grupo de médicos hizo eco de lo anterior y clasificó a quienes no se comportaban de ese modo como enfermos, susceptibles de recibir tratamiento.

Andando el tiempo se intentó erradicar los términos peyorativos y substituirlos por otros más neutros como “Parafilias” neologismo de John Money que, etimológicamente, significa “A un lado del amor”, un poco más suave, pero “a un lado”, significa algo así como lo permitiré porque soy muy magnánimo y te tolero.

A principios de los 80´s en México y en IMESEX, algunos hablamos de Expresiones comportamentales de la sexualidad, y poco después se redujo a expresiones de la sexualidad. La propuesta era que tales comportamientos existían potencialmente en todos los seres humanos, que tenían dos dimensiones una no erótica y otra erótica; ambas con distintos niveles que iban desde la expresión cero o nada hasta exclusividad, la cual aunque difícil no resulta imposible. Debe quedar claro que exclusividad hace alusión a que sólo ese comportamiento funciona para obtener satisfacción sexual o el orgasmo.

En el caso concreto del Fetichismo, y de acuerdo a nuestra propuesta se dice que la inmensa mayoría de las personas tienen un fetiche, si no me lo creen pídanle a una mujer que les muestre su cartera, aparte de las credenciales que resultan indispensables en esta sociedad pues sirven para demostrar que uno es en realidad quien dice ser, muchas traen fotos de alguien por quien experimentan afectos. Los hombres no escapan a esto, abundan quienes igual cargan fotos familiares, y no faltan taxistas que cuelgan del espejo retrovisor el zapato de su hija o nieta; esos objetos tienen un simbolismo específico que les hacer rememorar de forma vívida a una persona. Con inusitada frecuencia se atribuyen al objeto o imagen características milagrosas. Todo lo anterior en el plano no erótico. Y quizá entrando a un terreno que puede considerarse como riesgoso y resbaladizo podríamos pensar igual son fetichistas las personas que usan amuletos o guardan imágenes a las que atribuyen poderes, la mayor parte de las veces sanadores aunque existen variedades que se invocan para causar mal. Mi tía Camila Cienfuegos Oliva cuando salía de su pueblo para ir a México (Así se decía), siempre cargaba una cartera en el seno con estampas de San Judas Tadeo, San Cristóbal y San Miguel, espero coincidan conmigo en que podría considerarse “Fetichista no erótica”. Cualquier parecido con alguien que conozcan será mera coincidencia.

En el terreno de lo erótico es fácil imaginar o recordar al joven que robó las pantaletas de una hermana, prima o vecina y se masturbaba con esa prenda, ya sea viéndola, oliéndola o portándola; lo anterior sirve para entender que estos comportamientos se van entretejiendo y ejemplifican un patrón complejo, pues está el fetichismo, pero si también le atrae el olor hablaríamos de “Rinofilia”, si disfruta el tacto agregaríamos “Tribofilia”, y así podríamos seguir explorando otros sentidos y haciendo más interpretaciones.

¿Puede considerarse lo anterior una patología?

De acuerdo al esquema propuesto existen un par de marcadores a ser tomados en cuenta:

1. Cuando el sujeto se siente mal con su comportamiento y pide ayuda, o

2. Cuando causa perjuicios a otras personas, las cuales pueden llegar a demandarle, por ejemplo, si ya dejó sin tangas a las vecinas de su condominio, y le sorprendieron, es muy factible que lo demanden ante la justicia. En ese caso tal conducta se convierte en un delito, y por tal motivo puede ser canalizado para recibir tratamiento; aunque lo más factible es que se haga acreedor a un castigo.

Pero ¿habrá qué hacer algo con esos individuos que no molestan a otras personas? Si cumple con sus obligaciones, civiles, religiosas y hasta fiscales, y tiene ese tipo de conducta ¿a quién daña? Para acotar un poco más, rara vez las personas con rasgos fetichistas llegan a consulta por motu propio.

¿Cuándo puede hablarse de patología?

Quizás cuando dicho comportamiento se realiza en exceso, o dicho de otra forma, cuando actúa compulsivamente, a tal grado que no cumple con sus actividades cotidianas o éstas se ven alteradas y presenta problemas familiares, escolares, sociales o legales.

Puede darse el caso de que se sienta atraído por objetos, o por partes del cuerpo de otra persona, a lo cual se ha llamado “Parcialismo”, las más mencionadas en la literatura son los pies, y no sólo los pies deformados (para ellos formados) de las mujeres chinas en los siglos pasados, sino los pies por sí mismos, a los cuales el brindarles cierto tipo de tratamientos (caricias) les lleva a excitarse y en ocasiones les permite alcanzar el orgasmo. La mayor parte de las veces se trata de una actividad consensuada, motivo por el cual no resultaría punible. Y es que en el ámbito de la sexualidad

“Se vale todo, siempre y cuando exista acuerdo, no se vale hacer algo en contra de la voluntad de otra persona”.

Como dato curioso abundan quienes afirman que los hombres heterosexuales, por lo general, fragmentan a las mujeres cuando las miran, existen ciertas partes del cuerpo femenino que llaman la atención con mayor intensidad: las nalgas, los pechos, las piernas, la cara, el pelo, y un gran etc. etc. Sugiero pongan atención a los comerciales y analicen el uso que hacen de la figura femenina; desde algún tiempo, Photoshop ha permitido destacar y exagerar aquellas zonas consideradas como erógenas.

Stoller un sexólogo muy connotado decía que

“Un fetiche es una historia disfrazada de objeto”

Robert Stoller

señalaba que el fetichista prefiere un objeto a la persona, el cual a veces necesita robar. Afirmaba que el placer se incrementaba pues el objeto siempre estaría disponible para usarlo cuando y como se le antojara, al fetichista y que, incluso podría destruirlo.

Rodrigues un sexólogo (amigo) brasileño, habla de factores predisponentes, por ejemplo, la dificultad para establecer relaciones interpersonales o una pobre autoestima. Sin embargo, podemos señalar que lo anterior puede ser causa o consecuencia.

Otros autores enfatizan que una conducta pertenece al ámbito de las parafilias cuando se da exclusividad, de modo que si eres como el Aventurero no eres un parafílico porque de acuerdo a la canción:

“Me gustan las altas y las chaparritas, solteras y viudas y…

Los problemas pueden surgir sobretodo en pareja, cuando la conducta no se le ha compartido a la otra persona y descubre algo que le llama la atención, pero además le impacta. Si al individuo, por ejemplo, le gustan las tangas y su pareja descubre que tiene una colección, o una que no le pertenece de inmediato elaborará infinidad de hipótesis que pueden ir desde

“Tienes una amante o eres gay”.

La vergüenza de haber sido sorprendido dificulta el brindar una respuesta coherente. En cambio si le comparte que le gusta realizar el acto sexual de determinada forma y la pareja se atreve a probar cómo se siente al colaborar puede: disminuir su angustia, y en dado caso hasta enriquecer el encuentro sexual.

Quienes acuden a tratamiento con un profesional que maneje dichos casos, no se verá compelido a dejar de hacer aquello que le agrada, más bien se le animará lo mismo que a su pareja a explorar diversas maneras de relacionarse, y después, tomar decisiones de manera responsable e informada.

Podrá parecer un chascarrilo pero si pensamos con detenimiento quizás estemos de acuerdo con que

“El fetiche no es tan problemático como
el metiche que urga en lo que no le interesa”.

Y no lo olviden, Oj-Allah pronto volvamos a coincidir.

Bibliografía:
  • Wilkipedia. https://es.m.wikipedia.org/wiki/Fetichismo
  • Arango de Montis. “Sexualidad humana”. Editorial Manual Moderno. México, 2011
  • Bancroft john. “Humanista sexuality and ITS problemas”. Churchil Livingstone. ELSEVIER. 2009
  • Cabello Santamaría Francisco. “Manual de sexología y terapia sexual”. Editorial Síntesis. España, 2010
  • Gotwald HW y Gale HG. Sexualidad la experiencia humana. Editorial Manual Moderno. México, 1983
  • Kolodny, RC, Masters WH y Johnson VE. “Tratado de medicina sexual”. Edición Revolucionaria. Cuba, 1985.
  • Kolodny RC, Masters WH y Johnson VE. “La sexualidad humana”. Editorial Grijalbo. España, 1987
  • McCary JL, McCary SP, Álvarez-Gayou JL, Del Río C. y Suárez L. “Sexualidad humana de McCary. Editorial Manual Moderno. México, 1996
  • Rodrigues Oswaldo. “Sexología clínica. Una visión Latinoamericana”. Editora LP Books, 2014

Varón, cómo mejorar tu erotismo

Por Francisco Delfín Lara

Este relato se refiere a un tiempo pasado o mejor dicho a un tiempo que quisiera hubiéramos superado, esto es que las cosas ya no fueran como lo aquí narrado, pero tú me ayudarás a dilucidar si tengo razón o no. Así que escucha y opina, por favor.

Aunque una gran cantidad de personas insistía en que la actividad sexual debía ser algo sumamente placentero, la realidad es que la sociedad nos proveía con pocas estrategias para alcanzar tal fin. La socialización impartida a la inmensa mayoría de los varones de sociedades como la nuestra enfatizaba que, debía ser un individuo a quien sólo le atrajeran las personas del otro sexo. Quizá por ello no se le hablaba de selectividad, al contrario, se le hacía saber que debía sentirse atraído por cualquier tipo de mujer. Jamás se le dijo que  procurara el disfrute de la otra persona, nada de eso, más temprano que tarde introyectaba que lo importante era penetrar y por supuesto eyacular.

Por otro lado, puede afirmarse que a la mujer el tema de la sexualidad le estaba vedado y se consideraba de mal gusto que insinuara algún interés por el mismo.

Como bien sabemos los factores adquiridos, en los primeros años de nuestra existencia, repercuten en nuestras actuaciones y querámoslo o no también se manifiestan a lo hora de tener relaciones sexuales.

Describo a continuación una serie de estereotipos masculinos que existían y me permitirán desarrollar el tema.

  1. El funcionalista: para el sujeto que se hallaba en la parte superior de esa escala erótica, cada experiencia sexual se presentaba como una magnífica oportunidad donde demostrar su potencia; pero para el que ocupaba la parte inferior de la misma, cada actividad sexual se constituía como una terrible prueba. No obstante, para ambos la erección era la parte medular del acto, siguiéndole en importancia la eyaculación, más allá de sí se alcanzaba o no el orgasmo. Tengamos presente que aunque eyaculación y orgasmo, la mayoría de las veces suceden al mismo tiempo, son fenómenos diferentes. Queda claro que lo fundamental era el adecuado funcionamiento. La erección era la prueba máxima de masculinidad, de ahí que muchos parfraseaban a Rene Descartes diciendo: “Se me para, luego existo”. El no tener la erección hacia que el individuo se sintiera humillado y poco hombre.
  2. El focal: a veces se detenía en una región corporal específica, casi siempre la misma ignorando el resto. Pechos, nalgas y genitales, eran las áreas donde con mayor frecuencia concentraba su atención. Solía dar unos cuantos toques hasta que se excitaba y entonces procedía a penetrar.
  3. El gran pretencioso: es el que afirmaba conocer, incluso mejor que su propia compañera, las caricias idóneas para excitarla y llevarla al orgasmo. Si ella se atrevía a decirle que prefería otras distintas intentaba convencerla de que nada sabía al respecto, o se retiraba indignado y ofendido por no apreciar sus esfuerzos.
  4. El gaucho veloz: para este varón lo más significativo era responder de inmediato. Por lo general tenía una erección instantánea seguida de una, no menos rápida, eyaculación. Desde el punto de vista reproductivo actuar de ese modo se constituía como una ventaja, pero para su pareja que posiblemente buscaba placer, las altas y cotidianas velocidades sólo significaban malestares, frustraciones y a la larga: RESENTIMIENTOS.
  5. El insaciable: estaba convencido de que su apetito sexual era el idóneo. Desde tiempo inmemoriales la inmensa mayoría de la gente ha creído que los varones son quienes tienen mayor deseo sexual. En la actualidad y aun antes de la pandemia, cada día son más las parejas donde las quejas en torno a las pocas relaciones sexuales son emitidas por las mujeres. El no aceptar que mi compañera tenga un mayor grado de deseo que el mío origina una gran incomodidad en vista de que no encaja en lo estipulado por la sociedad y puede llevarme a que la acuse, al menos de… ninfómana.
  6. Bicman o el hombre “Bic”: Aseguraba que no sabía fallar, no obstante, ante la más leve modificación en su rutina  amatoria, este varón experimentaba algo de miedo y en el supuesto de que las modificaciones aumentarán o hubieran insinuaciones inesperadas el miedo se transformaba en pánico.
  7. El torero: para este individuo la relación sexual se dividía en tres tercios: en el primero daba unas cuantas caricias y de inmediato llamaba a los picadores, esto es en el segundo tercio acontecían la penetración y eyaculación; en el tercero, aunque soñaba salir en hombros o dar la vuelta al ruedo por su magnífica actuación, solían no alcanzarle las fuerzas y simplemente se dormía.

Quiero enfatizar que estas caricaturas son fruto de mi mente perversa, cualquier semejanza con algún conocido de antaño o de la actualidad, es pura y simple coincidencia.

Me gustaría que ese tipo de hombres hubiese evolucionado, pero en el supuesto de que aun existan, sugiero aprovechen la encerrona obligatoria y ensañen algunas de estas estrategias que quizás les permitan disfrutar más, en pareja los encuentros eróticos.

  1. Un poco de flexibilidad: lo ideal es tener en mente que el encuentro con la compañera es un acto en el que se busca pasarla bien y no siempre debe finalizar con un coito.
  2. Considerar a las caricias como valiosas en sí mismas: Es evidente que algunas nos gustan más que otras pero no por eso han de menospreciarse. Si somos capaces de mantener alejada de la mente la idea de la obligatoriedad de la penetración podremos disfrutar tocamientos que en primera instancia no son elevados a la categoría de erógenos.
  3. Disminuir nuestra sensibilidad a la crítica: Si conseguimos esto podremos ser mejores amantes. Cuando se hace cualquier tipo de programa una de sus partes más importantes es la evaluación del mismo. Por medio de esta actitud las acciones se afinan y es posible una mejora sustancial. Lo mismo ocurre tratándose de las expresiones sexuales.
  4. Erotizar mis acciones: considerar que cada uno de los momentos es único y por tanto insustituible. Cada vez que mis manos la tocan es una oportunidad para dibujar de nuevo su silueta; cada palabra murmurada en el oído es algo así como agregar eslabones a una cadena que en esencia le enfatiza que la deseo; cada mirada es como un manto que la cubre para que pueda admirarla más y mejor; cada vez que aspiro su aroma es como si ella me penetrara y tomara posesión de mí; cada vez que gusto sus diferentes sabores tengo la impresión de que apenas la conozco pero quedo conminado a seguirla disfrutando.
  5. Jugar con picardía: El acto sexual puede ser serio porque implica, sobre todo, acuerdo pero no tiene porque ser solemne y mucho menos acartonado. Se vale divertirse, variar, inventar y olvidarnos del: sale pan con lo mismo.
  6. Aceptar, sin temores cuando ella sea propositiva: esto es, erradicar de nuestra mente la sentencia que me señala como quien debe llevar la pauta a la hora de hacer el amor. Nada más alejado de la realidad, esta es una actividad compartida que se enriquece en la medida en que ambos contribuyen con su imaginación y creatividad.
  7. Agradecer que tiene conocimientos sexuales y disfrutarlos, en vez de romperme la cabeza intentando imaginar como pudo adquirirlos.
  8. Saber que ella no es una posesión mía a la que puedo usar cuando se me dé la gana. Mi pareja es un ser humano, con el cual no siempre habrá coincidencias, pero cuando ella accede a mis peticiones, lo correcto es actuar en consecuencia.
  9. Ella tiene derecho al placer sexual: es mentira que cuando dos se aman con uno que disfrute, basta. Hacer el amor es un proceso en el cual, los integrantes de la díada se aventuran a la búsqueda de satisfactores, para ambos. El placer se percibe a lo largo del acto y seguramente, después del mismo.
  10.  Nada de cumplir: esta actividad alcanza sus máximas realizaciones cuando se lleva a cabo por mutuo acuerdo. Si se ejecuta a modo de tarea, cansa y produce bastante dolor.
  11.  Olvidarse del orgasmo al mismo tiempo: Las modas cambian a cada rato. Primero dijeron que las mujeres no disfrutaban y por lo tanto, el hombre se centraba en su propio placer. Después se mencionó que podían llegar a un orgasmo o a muchos, dependiendo de la pericia del varón. Más adelante alguien sentenció que alcanzar el clímax al unísono es la máxima experiencia. La realidad es que el orgasmo es un disfrute individual durante el cual uno tiende a aislarse del mundo. Me parece que lo ideal es colaborar para que ambos disfruten en vez de empecinarse en, sincronizar los cronómetros, ya que eso suele ser un distractor capaz de producir frustraciones.

Quiero finalizar señalando que menciono los cambios que a mi juicio requerimos los varones pero, me parece que ambos miembros de la pareja tienen que poner de su parte para elevar el grado de disfrute y conscientizar que el erotismo no sólo está presente en las cercanías del lecho. En la medida que me muestre atento e interesado por mi pareja ella me corresponderá. Siempre será bienvenida esa señal indicadora de que no sólo la amo sino que la deseo. Jamás se cansará de escuchar frases tiernas, afectuosas y por supuesto también apasionadas. Despleguemos todas las estrategias necesarias para cumplir con aquella sentencia que nos ubica como el animal más erótico. Aprovechemos todos los recursos con los que contamos para alejarnos de esa añeja tendencia al sufrimiento.  Disfrutemos cada instante al máximo sabiendo que el placer sexual no es algo malo y puede incrementarse en la medida que lo compartamos con nuestra pareja.

Bibliografía:
  • Delfín Lara Francisco. Le daré otra oportunidad. En Sex populi. Editorial Alfil. México, 2009:39
  • Roels Rick & Janssen Erick. Sexual and Relationship Satisfaction in Young, Heterosexual Couples: The Role of Sexual Frequency and Sexual Communication. J Sex Med 2020;17:1643e1652

Los besos, las caricias y tantas otras cosas…

Por Francisco Delfín Lara

Ese verso de José Alfredo, es probable que alguna vez lo hayamos cantado y aunque el final no es fascinante (que te entregaste a mí) da pie para disertar un poco sobre la importancia de conocer y aceptar la inmensa  cantidad de recursos con que contamos para incursionar con nuestra pareja en el ámbito del erotismo y que sin embargo, pocas veces usamos pues existe una especia de resistencia al cambio. De entrada llama la atención que para el canta-autor guanajuatense, como para una gran cantidad de personas de nuestro país y de sociedades como la nuestra, las mujeres son las que se entregan y se dan a los hombres que gustosos las reciben sin necesariamente comprometerse.

Los besos

En la actualidad el beso es una de las caricias más populares a la cual se le han dedicado: poesías, estatuas, pinturas, canciones, películas y hasta la grabación 2 de este Blog: Relatos de un sexólogo. Como recordarán esta caricia no siempre existió y no en todas partes se practicaba.

Si bien el beso se acepta en nuestra sociedad, conforme la pareja pasa más tiempo junta declinan la frecuencia e intensidad de la misma, hay una especie de regresión. Los primeros besos del noviazgo eran de a piquito, tibios, cortos, secos y recatados; al paso del tiempo las bocas se abren como queriendo absorber a la otra persona; las lenguas se acarician y exploran la otra boca gustando el sabor que conservará, para más tarde evocar su recuerdo. Esa húmeda caricia sinónimo de gran intimidad, se constituye en el punto de arranque a partir del cual se prodigará por territorios desconocidos, tantos, como apertura exista en la díada. Pero conforme pasan los años surge una especie de mezquindad, de modo que no sólo escasearán sino que se concentrarán en la frente o se disfrazarán de chasquido al juntar las mejillas a modo de saludo o despedida. Y si estamos interesad@s en la prevención vale la pena reflexionar sobre los siguientes versos de Cuco Sánchez:

“Igual que en tierra seca,
la humedad penetra
así te metes tú
poquito a poco”

Cuco Sánchez

El compositor describe un cuerpo sediento de caricias, besos y ternura. De seguro nadie se enojaría si su pareja le tapizara el cuerpo de besos, como haciéndole un traje a su medida y conste que no hablamos de penetraciones.

Una queja constante, sobre todo por la parte femenina es en el sentido de que los besos sólo resurgen ante la inminencia del coito. Ayuda a conservar, esta sana costumbre, tener presente que jamás sobran los cuidados a nuestra boca para que reúna las mejores condiciones de higiene porque si hay algo desagradable es acercarse a quien tiene mal aliento. No deben escasear las visitas al odontólogo y comer con moderación alimentos como: cebolla, ajo o pescado. Nunca está de más el masticar unas hojas de menta porque decía una prima:

“besar a alguien que fuma
es como lamer un cenicero”.

Las caricias

La mayoría de las veces la gente acaricia de acuerdo a sus gustos muy particulares y eso en ocasiones se transforma en un problema pues muchas mujeres son incapaces de decirle a su compañero:

“así no me gusta” o “hazme de este modo”

Temen, y no sin razón que él se enoje. Querámoslo o no una gran cantidad de varones considera que sus tocamientos deben dejar extasiada o al borde del colapso a cualquier mujer y se indignará si ella se atreve a insinuar el más mínimo desagrado; pocas cosas hieren más el ego masculino que comentarios de ese tipo. Tengamos siempre presente que en el encuentro erótico el acuerdo es la parte medular, bajo ninguna circunstancia se vale hacer algo en contra de la voluntad de la pareja; es muy deseable, alternarse para proponer la actividad sexual pero la imposición, bajo ninguna circunstancia es aceptable.

Por lo antes mencionado es incuestionable que uno de los pilares fundamentales de la relación de pareja es la adecuada comunicación y para ello es imprescindible la confianza, pero no sólo para compartirle lo que me gusta sino también para señalarle que hay cosas que no me agradan lo cual de ninguna manera significa que no le amo. 

Nuestros conocimientos de las artes amatorias tienen sustentos muy débiles, por ejemplo, en la escuela secundaria todo mundo conoció a un personaje muy especial que, pese a dárselas de sexperto, siempre recomendaba besar: cuello, boca u oreja; en realidad de cinco o seis regiones no pasaban las zonas erógenas que a su juicio eran las infalibles para poner a punto a la pareja. A estas alturas de la vida es necesario aceptar que aquellas recetas no fueron tan extraordinarias; resulta más adecuado volver la mirada hacia quienes dedicaron gran parte de su vida a investigar, en serio, la forma como responde el cuerpo a los estímulos sexuales efectivos. William H. Masters y Virginia E. Johnson junto con Helen S. Kaplan fueron los pioneros pero día a día se suman investigadores. Por ejemplo, en julio del 2020 Roels y Janssen encontraron que si bien la frecuencia sexual es importante, la comunicación en general incluída la sexual predijo la satisfacción de la relación sexual y de pareja. Se vale hablar tanto de deseos como de necesidades, es decir, compartir la intimidad estrecha los vínculos.

Ni duda cabe que uno de los elementos más valiosos a la hora de la intimidad es el tiempo, el cual debe estar a nuestro favor, es decir, olvidémonos de las prisas. Cuando tomamos las cosas con calma y nos proponemos compartir el placer constatamos que la piel es el órgano sexual más grande; si somos capaces de viajar poro a poro hallaremos distintas sensibilidades lo cual obedece a que las terminaciones nerviosas se encuentran distribuidas en diferentes concentraciones.

En los talleres, cuando pido a las mujeres enumeren las zonas erógenas femeninas suelen contestar: “la cabeza, la cara, el cuello, los pechos, la espalda, el vientre, los genitales, las nalgas, las piernas, los pies, los brazos, las manos, etc.” En contraste cuando le pido a ellos que hagan lo correspondiente respecto a las zonas erógenas masculinas con frecuencia responden: “el pene”. Por cierto un varón en Irapuato, una vez dijo “¿A poco hay otras?

Erotismo

Quienes piensan que la actividad erótica comienza en la cama o al menos al borde de la misma cometen un craso error. El erotismo, característica muy humana, flota en el ambiente, se halla en todas partes y en cualquier momento, sólo que mentes puritanas se han empeñado en colocarnos unas gafas para impedir su visualización. La realidad es que se nos ha educado, paradójicamente, para limitar nuestra imaginación y para retornarnos a un estado menos evolucionado. La gran mayoría de los animales irracionales acceden al coito, sólo, cuando la hembra está en celo, estro o brama, es decir, copulan para reproducirse. En nuestra especie, en cambio, no es necesario que la mujer esté ovulando pues el deseo puede llegar en cualquier momento, a cualquier edad y en ambos sexos.

Según el Dr. Eusebio Rubio Aurioles, sexólogo mexicano, el erotismo es una:

“dimensión humana que resulta de la potencialidad de experimentar placer sexual”.

Dr. Eusebio Rubio Aurioles

Y según chavos de una prepa, se relaciona con las caricias, la sensualidad y con el ser cachondos. Nuestro cuerpo cuenta con diversos elementos para identificar ciertos estímulos como agradables, a veces de tal magnitud que nos llevan a sentir gran excitación pero a diferencia de los irracionales no estamos condenados a seguir pautas específicas de conducta, es decir, cuando experimentamos esas sensaciones no siempre tendremos que concluir con un coito.

Si como dijo Jean Paul Sartre: “Estamos condenados a la libertad”, aprovechemos tal situación para compartir con nuestra pareja: ternura, afecto, pasión y todo el erotismo que seamos capaces de inventar sabiendo que tenemos la capacidad de mejorar nuestros actos siempre y cuando revisemos los mismos desde la perspectiva de ambos miembros de la díada. Sugiero escuchen lo Oliverio Girondo* dice al respecto.

¿Propuesta indecorosa? NO, erótica

Con el propósito de que no todo sea puro rollo sugiero tengan un encuentro íntimo siguiendo, casi al pie de la letra, las instrucciones. Para realizar esta sesión amorosa se requiere desnudez, que un miembro de la pareja comience a tocar al otro, poniendo en dicha actividad especial atención pues se trata de conocer o reconocer como es esa piel: lisa, rugosa, caliente, tibia, fresca, seca, húmeda, con vello, lampiña, etc. El objetivo es explorar, minuciosamente, todo el cuerpo de la pareja, centímetro a centímetro, pero sin tocar ni pechos ni genitales. Tampoco se debe hablar, salvo que algo moleste. Una buena exploración se lleva unos 30´ y la persona que está siendo tocada se dedicará a sentir.

¿Quién sabe que sentirá?

NO DEBEN DAR MASAJE PORQUE SE DORMIRÁN, ACARICIEN PARA BRINDAR PLACER A SU PAREJA

Tan pronto, la primera persona acabe de tocar se invierten los papeles y se repite lo ya mencionado. Es probable que con esos tocamientos surja excitación, si así sucede, bajo ninguna circunstancia repriman esas sensaciones, pero tampoco interrumpan la sesión. Dense permiso de transformarse en un ser sensible y sensual. Cuando ambos miembros hayan terminado platiquen: que sintieron, que les gustó, que se les antojó y después PÓNGANSE DE ACUERDO Y HAGAN LO QUE SE LES ANTOJE.

Algo digno de ser tomado en cuenta es que ir al acto sexual en busca de un orgasmo puede contribuir a que se dificulte su consecusión, sobre todo si la gente se obsesiona; es mejor aventurarse a buscar el placer para ambos miembros de la díada; caben a la perfección las palabras de San Juan de la Cruz:

“Si quieres ir a donde no sabes
tienes que ir por donde no sabes”.

San Juan de la Cruz

Un consejo SÓLO PARA VARONES: la actividad erótica no comienza en el borde de la cama o en ese instante en que se te antojó hacer el amor. Las caricias cotidianas (incluidas las verbales) ponen a la mujer en un estado de mayor aceptación para los encuentros eróticos y ayuda mucho el saber que también podemos tener sesiones de caricias que no necesariamente tengan que terminar con un coito. El ser travieso o pícaro es muy bien recibido por la compañera. Una venerable anciana le dijo a su nieto más amado:

“las mujeres necesitamos ser abrazadas,
al menos, cinco veces al día”

Los besos son caricias que aparte de disfrutables producen sensaciones de bienestar, cercanía y ternura en quien los recibe aparte de que contribuyen a que la pareja alcance altos grados de excitación. Olvidemos la tacañería y besemos a nuestra pareja de muchas formas en cualquier ocasión de seguro te lo agradecerá.

*Poema de Oliverio Girondo

Se miran, se presienten, se desean,
se acarician, se besan, se desnudan,
se respiran, se acuestan, se olfatean,
se penetran, se chupan, se demudan,
se adormecen, despiertan, se iluminan,
se codician, se palpan, se fascinan,
se mastican, se gustan, se babean,
se confunden, se acoplan, se disgregan,
se aletargan, fallecen, se reintegran,
se distienden, se enarcan, se menean,
se retuercen, se estiran, se caldean,
se estrangulan, se aprietan, se estremecen,
se tantean, se juntan, desfallecen,
se repelen, se enervan, se apetecen,
se acometen, se enlazan, se entrechocan,
se agazapan, se apresan, se dislocan,
se perforan, se incrustan, se acribillan,
se remachan, se injertan, se atornillan,
se desmayan, reviven, resplandecen,
se contemplan, se inflaman, se enloquecen,
se derriten, se sueldan, se calcinan,
se desgarran, se muerden, se asesinan,
resucitan, se buscan, se refriegan,
se rehuyen, se evaden y se entregan.

Oliverio Girondo
Bibliografía:
  • Girondo Oliverio. Obras completes. Editorial Palabras. P:106
  • Roels Rick. Sexual and Relationship Satisfaction in Young, Heterosexual Couples: The Role of Sexual Frequency and Sexual Communication. Journal of Sexual Medicine. 2020;17:1643e1652

Los progenitores y la responsabilidad sexual

Por Francisco Delfín Lara

Respecto al tiempo Agustín de Hipona dijo:

“”Sé bien lo que es, si no se me pregunta. Pero cuando quiero explicárselo al que me lo pregunta, no lo sé’”

Filosfía apuntes

Aquí entre nos me pasa algo similar y es que para definirlo sólo gente como Einstein o Stephen Hawkins; menciono esto porque resulta de capital importancia para el tema sobre el cual esbozaré algunas ideas.

Antes de continuar debo señalar que en estas grabaciones no pretendo que lleguemos a un acuerdo pero, si después de escucharme quedan inconformes o con dudas, habré logrado mi objetivo pues me interesa que la gente se mueva y deje de repetir lo dicho por quien sabe quién, quién sabe dónde y quien sabe cuando.

Para 2018 se calculaba que había 1,800 millones de personas de 10 a 24 años de edad; de ese total 175 millones no podían leer o escribir una frase completa, y 500 millones de 15 a 24 años vivían con menos de dos dólares diarios (2018. La Jornada). Que suerte que en nuestro caso no sea así, podrás decir, pero…

¿Te has puesto a considerar que vivimos en una sociedad donde el autoritarismo se ha filtrado a todas las capas, de los sectores más poderosos a los más depauperados, hay jerarquías y nadie desea ocupar los peldaños más bajos, se busca estar siempre por arriba de alguien; ¡cuidado con ocupar el último lugar! podrá parecer tonto pero más que estar muy alto, importa que haya otros por debajo de nosostros. Como dijo el mal compadre cuando los perseguía un enorme y feroz perro:

“La verdad yo no quería correr más rápido que el perro, me bastaba con correr más rápido que mi compadre”.

Aparte de los grandes empresarios y gente con billetes, los políticos son ejemplares pues sus discursos se orientan a convencer a las masas de:

“Aunque todo está mal, muy pronto enderezaremos el rumbo, verán que con nosotros toda cambiará”

Las masas ávidas de creer, lo aceptan a pie juntillas, como lo han hecho por años y votan por él pero a final de cuentas todo sigue igual.  

En el hogar las cosas no son muy distintas, los papeles estelares se reparten entre padre y madre, los cuales, por cierto, nunca recibieron información sobre lo que eso significaba y mucho menos sobre cuales serían sus funciones ni cómo desempeñarlas. Quizá por lo antes mencionado, la mayoría de las veces, educamos, programamos o condicionamos a nuestra descendencia para que hagan o dejen de hacer (según sea el caso) todo aquello que consideramos los convertirá en criaturas buenas; para conseguirlo una de las estrategias idóneas es… la obediencia.

La prohibición es otra de las herramientas favoritas para controlar a la gente menuda, por supuesto, rara vez se les explica el porqué de la negativa, siguen resultando muy efectivas sentencias del tipo:

“Porque soy tu madre”
o
“En esta casa se hace lo que yo digo”

Agreguen las que hayan padecido y luego en un acto de enorme valor, analicen cuántas han usado con hijas e hijos, aunque ya sabemos que

“Ha sido por su propio bien”

Frases tan inconsistentes y absurdas como la que mi Tía Zenaida Goicochea le endilaga a mi primo Ausencio cada vez que le pegaba

“Créeme que esto me duele más a mi que a ti”.

Zenaida Goicochea

Si bien casi nadie les recuerda, hace varios años Alvin y Heidi Toffler dijeron que vivíamos en la época del cambio, para más adelante comentar que los dueños del mundo serían los que manejaran y controlaran la información. Resulta fácil darse cuenta de lo acertado de su aseveración, porque vemos computadoras por todas partes, y ahora con la pandemia mucho más. Sin embargo, si tú crees que en el “Buen fin” conseguirás una oferta lamento decirte que no lo creo porque eso de “Buen fin” es para los comerciantes no para la clientela.

Conforme pasa el tiempo, la pubertad se presenta más temprano y en contrapartida se recomienda que la gente se case a mayor edad, motivo por el cual la adolescencia se prolonga más y más. Vale la pena aclarar que pubertad es un concepto biológico, se dice que proviene del latín Pubertat que significa, más o menos llenarse de pelos, otros dicen que vello en el pubis (Dicciomed), pero en esencia describre el incremento de las hormonas gonadales. En cambio adolescencia es un concepto construido, se refiere al tiempo que transcurre entre infancia y adultez.En otras culturas la niña y el niño, por medio de una ceremonia de iniciación llegan a la adultez o serán responsables de sus actos, cuando menos oficialmente, como entre los judíos por medio del Bar Mitzvah para ellos y Bat Mitzvah para ellas.

En el Congo, cuando varios chicos llegaban a la pubertad eran pintados de negro y enviado con sus madres a una zona limpia de árboles donde  convivían con ellos varias horas. Pero a media noche llegaban unos seres monstruosos (guerreros disfrazados) para llevarse a los niños a un lugar donde los esperaban los circuncidadores. La ceremonia se efectuaba después de embriagarlos, ellos debían resistir sin quejarse, luego de lo cual eran aceptados como guerreros. Esa noche las madres lloraban la muerte de sus niños, pero al otro día, desde lejos celebraban el nacimiento de los futuros guerreros.

En varios grupos musulmanes, las chicas son sometidas a un procedimiento que, eufemísticamente, se denomina circuncisión pero que para una gran cantidad de personas, en realidad es una mutilación, hay de varios tipos, pero los que más llaman la atención son: la Suna y la Faraónica, en la primera se extirpa el clítoris y en la segunda se quitan además: los labios menores y se cierran los mayores, dejando un orificio para que salga la menstruación. Vale la pena recordar que este procedimiento esta prohibido por la ONU, aunque ello no significa que haya dejado de practicarse. Es necesario comentar que hay personas que no están de acuerdo con que se hable de mutilación genital, por ejemplo el Dr. en Antropología Social, Lodoño Sulkin, Profesor del Departamento de Antropología de la Universidad de Regina en Canadá, afirma estar de acuerdo con lo planteado por la antropóloga sierraleonesa y estadounidense, Dra. Fuambai Ahmadu quien se realizó la circuncisión femenina ya de adulta de forma voluntaria, dice que “los movimientos Antimutilación Genital Femenina son parroquiales y no liberales” (2010: Londoño). Comentarios tan extremos me animan a revisar y analizar el tema en una futura grabación.

En nuestra sociedad la adolescencia es un constructo social, una especie de limbo donde ha de permanecer la juventud hasta alcanzar la mayoría de edad; se asegura que ese lapso sirve para obtener habilidades garantizadoras de una vida exitosa, sin embargo, también se constituye como una época de indefensión donde se les acusa de todo y ocasiona tales problemas, que jóvenes y progenitores se la pasan llenos de angustia, enojos y sinsabores.

La historia de ello puede deberse a la ignorancia, amnesia, falta de empatía o la combinación de todo eso. Abundan quienes se ufanan de dirigir a su prole, con la pura mirada, porque aseguran:

“Los niños a veces requieren ser domados”

Les Luthiers parodia lo anterior diciendo:

“Después de todo, los niños son seres pensantes, casi podríamos decir que son seres humanos”

Les Luthiers

Cuesta aceptar que han dejado de ser niños y que pueden tener deseos diferentes a los nuestros pues su desarrollo es una señal ineludible, y a veces cruel, de que envejezco.

Cuando digo:

“mi hijo es demasiado bueno e inocente”

Antes que sentirme orgulloso por su pureza debería cuestionarme: ¿qué tanto lo estoy menospreciando? ¿qué tanto lo minusvalizo? ¿por qué lo eduqué con tantas limitaciones?

Cuesta trabajo y duele aceptar su retirada; nos invaden tanto el enojo como la indignación pues prefiere otras compañías, además esa gente con la que se junta es muy diferente a nosotros. Sus cambios son tantos que les desconocemos, además es capaz de enfrentarnos y atemoriza recurrir a la violencia pues ignoramos como pueda responder.

Nos quejamos de su rebeldía sin darnos cuenta que del otro lado de ella está la dependencia, quiere volar, quiere hacer cosas por y para sí, pero quizá no le hemos enseñado lo suficiente.

Cuanto daño hace la desmemoria; ayudaría recordar que vivimos y sufrimos cosas similares cuando fuimos jóvenes. ¿cuánto se parecen mis discursos a los que me endilgaron mis padres? ¿qué fue lo que más me agradó de aquella época? ¿quién me dio su apoyo incondicional? Nuestra adolescencia fue una época de grandes sueños, descubrimientos, plena de ideales y energía, era una especie de aventura donde incursionamos a un nuevo mundo atractivo por desconocido, pero al que deseábamos ingresar solos, es decir, sin la compañía de los progenitores.

La adolescencia puede vivirse de un modo menos doloroso, para ambas partes, si nos preparamos y nos arriesgamos a cambiar de paradigma; en vez de formar descendientes obedientes, conviene que aprendan a resolver problemas.

Enseñemos a nuestros descendientes a que busquen el por qué de las cosas; la curiosidad ha sido una de las características que más han contribuido a la evolución del ser humano. Enfrentar  problemas que de manera gradual aumenten su complejidad estimula la maduración de las personas, lo ideal es colaborar a que nuestros hijos posean herramientas y habilidades para sobrevivir cuando no estemos presentes. Imposible ser sus eternos acompañantes, las bases morales se sientan desde el nacimiento de la criatura y aquello de que se educa con el ejemplo, es muy cierto; ten presente entonces que la congruencia es una buena compañera.

Dejemos atrás el viejo esquema culpígeno, donde la confesión de la falta es seguida por una penitencia para convertirse en un acto irreflexivo. Si conseguimos que nuestros hijos sean personas responsables podremos vivir más tranquilos.

En una investigación colombiana una madre de un colegio oficial dijo:

“¿Qué implica la sexualidad? Una responsabilidad…
¿qué tal que Ud tenga relaciones o deje embarazada
a una niña? Ud ¿con qué va a responder?
¿cómo va a responder?

Orcasita et al. 2018

Y eso es de lo que se trata, ser conscientes de las consecuencias de nuestros actos para enmendar los errores, y procurar no repetirlos.

La estrategia del avestruz (jamás comprobada) no funciona; condenar ciertos temas, al silencio, por temor a manchar la inocencia (ignorancia más bien) de las criaturas lo único que hace es exponerles a no saber como reaccionar cuando se topen con ellos. Resulta conveniente abordar los temas que más tememos pues, de ese modo nos enteraremos qué tanto, nuestros hijos saben al respecto y podremos combatir sus falacias, pero eso no ocurre en automático, se requiere preparación, hay que leer, informarse y estar actualizados. Es innegable que en la actualidad se habla más de sexualidad, pero un análisis cuidadoso mostrará que continúa vigente el esquema biologicista y patologizante, por ningún motivo se esboza que el erotismo puede ser algo muy placentero y menos aun tratándose de nuestras hijas.

Si cuando andas de bohemio recuerdas a Martín Urieta y cantas a todo pulmón:

“… mujeres o mujeres tan divinas
no queda otro camino que adorarlas”

Martín Urieta

Quizá te interese saber que en California, en el 2001 se encontró que:

Y ahora medita: ¿qué tanto enseñamos a nuestras niñas a defenderse? ¿qué tipo de comportamiento tengo hacia las mujeres de mi casa? ¿se sienten dignas e importantes?

Desde hace unos años los discursos rebozan de recomendaciones en torno a la conveniencia de hacer de la democracia una práctica constante, suena bien en primera instancia pero, ¿nos interesa que llegue a nuestro hogar? puede resultar peligrosa pues ya no podríamos usar la consigna aquella de:

los hijos no deben juzgar a sus padres

Llenémonos de valor y revisemos nuestros miedos, atrevámonos a compartirlos con nuestros hijos para ver cómo nos pueden ayudar. Recuerda que la comunicación resulta más efectiva cuando escuchamos, esto viene a colación porque una gran cantidad de padres confunden comunicar con interrogar y sermonear. Créeme le llenará de confianza saber que siempre le apoyarás.

Bibliografía.
  • Arredondo, María Luisa. Relaciones peligrosas: el 33% de las adolescentes sufren cierto grado de violencia durante sus citas romanticas por parte de sus compañeros, indica un estudio. La Opinión. 11/25/2001. Agence France Press Spanish. La ONU considera urgente invertir en el futuro de la mayor generación de adolescentes. 10/08/2003.
  • Dicciomed. https://dicciomed.usal.es/palabra/pubertad
  • Filosfía apuntes. Las confesiones. Libro XI: El concepto del tiempo. http://filosofiapuntes.blogspot.com/2017/04/san-agustin-de-hipona-las-confesiones_19.html
  • La Jornada. https://www.jornada.com.mx/ultimas/sociedad/2018/08/11/poblacion-record-de-jovenes-en-el-mundo-mil-800-millones-onu-3529.html
  • Londoño Sulkin Carlos D. La circuncisión femenina. La Antropología y el liberalismo. http://www.scielo.org.co/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0486-65252010000200012
  • Orcasita P. L. T., Cuenca J., Moentengro C. J. L., Garrido R. D. y Haderlein A. Diálogos y Saberes sobre Sexualidad de Padres con Hijos e Hijas Adolescentes Escolarizados. doi: https://doi.org/10.15446/rcp.v27n1.62148

Sexualidad y embarazo

Por Francisco Delfín Lara.        Octubre 23 del 2020

Desde hace muchos, pero muchos años ha quedado clara la falsedad de aquello de “Todas las criaturas vienen con una torta bajo el brazo”. Igual enterarse de que estar embarazada, siempre es la mejor de las noticias ¿recuerdan aquella vieja anécdota del ginecólogo que el dice a su paciente “Sra. le tengo muy buenas noticias”; ella responde indignada “Señorita, por favor”, a lo cual él agrega “Bueno Señorita, le tengo malas noticias”. Como la inmensa mayoría de los chistes tiene un mensaje, y es que resulta indispensable sopesar los factores en derredor de esta circunstancia como:

  • ¿fue planeado?
  • ¿es deseado?
  • ¿viene en el mejor momento?
  • ¿se cuentan con las condiciones más adecuadas para traer otro ser humano a este mundo?
  • ¿la mujer tiene buenas condiciones de salud?
  • ¿cuenta con suficientes recursos para esto que apenas comienza, porque de seguro los gastos irán en aumento?
  • ¿tiene pareja y está de acuerdo con el embarazo?

Como ya me cansé de enlistar estas situaciones, les invito a que agreguen las que juzguen pertinentes o me acusen de exagerado, por no estar de acuerdo con mi Tía Canuta que decía: “Donde comen dos comen tres”; en cambio una profesora amante de las inducciones acostumbraba a decir “Donde comen n, comen n + 1”.

Sólo de pensar en los gastos que se avecinan se congela la sangre y eso sin sumar los cubrebocas y líquidos desinfectantes, me niego a usar la horrenda palabra de saniti…

Suponiendo que todo está en orden, la embarazada puede continuar con la actividad erótica sexual, salvo indicaciones concretas y específicas por parte de quien le brinda la atención gineco obstétrica. Por ejemplo:

“El coito debe suspenderse si se rompe la fuente, existe sangrado vaginal, flujo y comezón, si hay dolor abdominal o vaginal, o si se diagnostica parto prematuro”.

Kimberley, 2002

Mi Maestro el Dr. Díaz Esponda agregaba que también en el caso

“…de abortos de repetición, partos prematuros frecuentes, y placenta previa”.

Dr. Díaz Esponda, 2004

Pero de ahí en fueran no hay argumentos para proscribir la actividad erótica sexual.

Entre los motivos más citados para insistir en la abstinencia erótica destacan las personas que consideran a ese estado como de santidad; razones menos románticas son esgrimidas por algunos hombres, presumidos a mi juicio, pues advierten que suspenderán las relaciones sexuales por miedo a dañar al embrión o al feto con el pene. Aquí entre nos, si fueras español, te llamaras Nacho Vidal y fueras artista porno, medio podría creerlo, pero el resto de los mortales, difícilmente llegará a esas profundidades, así que, por favor no exageres; más bien averigua a qué obedece tu negativa.

Recordemos que el feto está encerrado y flotando en una especie de cápsula llena de líquido en la cual las presiones se distribuyen de forma homogénea. Tampoco desarrollará traumas porque la pareja tenga relaciones sexuales, pues es falso aquello de que una tercera persona está presente durante la cópula.­­­

Si las creencias sobre lo nocivo de las relaciones durante el embarazo obedecen a desconocimientos sobre anatomía y fisiología, en la consulta de control del embarazo se podrán brindar intervenciones educativas para paliar dicha problemática: los motivos religiosos son un poco más difíciles de abordar, pero afortunadamente hay ministros muy comprensivos que orientan de forma adecuada a la pareja, y les señalan que hacer el amor no es pecaminoso.

Igual se alegaba que la embarazada no debería tener relaciones coitales por el gran esfuerzo a realizar, caray suena hasta bonito, pero ¿de verdad le disminuyen las cargas de trabajo que tiene? Ya sea ama de casa, o si trabaja de forma remunerada “De todos modos Juan te llamas”.

Cuando el embarazo es bien recibido podrá disfrutarse dicha etapa, pero lo sexual dependerá de cómo haya estado el erotismo previo, y por supuesto de la actitud de su pareja.

Diversas investigaciones muestran que en la mayoría de las sociedades la frecuencia coital tiende a disminuir, por razones muy diversas entre las que destacan las náuseas, dolor durante la relación y la fatiga, e igual por causas socioculturales.

Entre los Masai, habitantes de un territorio entre Kenia y Tanzania, en sus rituales de iniciación cazaban leones, en la actualidad ya no lo hacen, ahora son ganaderos que se alimentan de la leche de sus vacas, la cual a veces mezclan con sangre del mismo animal; en esa tribu se prohibían las relaciones sexuales tan pronto se enteraban del embarazo. Entre los Murgin del norte de Australia las relaciones estaban proscritas porque pensaban que si las tenían, la criatura nacería muerta. Los Ainu de Japón creían que el semen causaba ceguera al feto. Andando el tiempo se ha observado que los abortos son muy frecuentes en esas sociedades y quizá por ello, desde hace años se instauraron las proscripciones. Los Lepcha de la India permitían el coito todo el tiempo, pero sugerían no recargarse en la mujer, lo cual no debía ocurrir muy seguido porque decían que, tradicionalmente sus coitos eran muy, pero muy rápidos. Entre los Tanala de Madagascar y los Ifugao de Filipinas no había restricciones para la cópula, y ella podría tenerlas, mientras se sintiera cómoda. Hace años escuché hablar de los Koriakos, habitantes de la península de Kamchatka en el Mar de Bering,  parte de Rusia. Tradicionalmente se dividían en dos subgrupos: Koriakos Nemelan, gente de la costa o marinos, son sedentarios y viven de la pesca y los Koriakos Chauchen, viven territorio adentro, se dedican a la cría de renos de los cuales poseen grandes rebaños pero como dependen de esos animales su estilo de vida es nómada. Los Koriakos Nemelan creían que la criatura se iba formando con semen, y por ello animaban a las parejas a tener relaciones sexuales con la mayor frecuencia posible, quizá decían “Hoy le haremos el brazo, mañana el antebrazo, pasado mañana la mano” y así sucesivamente. Cuando la criatura nacía con alguna problemática afirmaban que había sido por falta de relaciones sexuales.

Con la llegada de la Psicoprofiláxis obstétrica y sus cursos, muchas parejas disfrutaron la preñez; las preguntas al ser respondidas enriquecían a todo mundo y disipaban dudas. Hay un libro cuyo título de seguro estremecerá a más de cuatro “Pariremos con placer”. Saquen sus propias conclusiones.

A últimas fechas se ha optado porque la pareja decida cómo ejercer su erotismo, aunque en ocasiones cuando la mujer pide cariño a su pareja, ni tardo ni perezoso  procede a desnudarse para copular, no obstante, ella sólo está pidiendo afecto, ternura, apapacho y cosas por el estilo, más no necesariamente un coito.

Si UD cree que lo antes relatado es cosa del pasado, lamento comentarle que no es así, en una muy interesante investigación del 2017, revisaron 13 estudios con 3,122 participantes y hallaron cuestiones positivas como que la sexualidad durante el embarazo, facilita el parto, promueve la armonía marital, previene la infidelidad y mejora el bienestar fetal. No obstante, igual hallaron otras no tan positivas como una investigación en Turquía donde los esposos afirmaron suspender las relaciones por ser pecaminosas. Otros autores hallaron disfunciones sexuales hasta en la mitad de los casos. El temor a la infidelidad masculina estuvo presente en una gran cantidad de parejas. En otro estudio realizado en Croacia los varones afirmaron evitar las relaciones por miedo a dañar al feto, pero se mantenían muy cercanos a su pareja (2017. Costa). ¿Su caso se ha parecido a alguno de lo aquí descrito?

En otro momento hablaremos del Síndrome de Couvade en el cual el hombre experimenta los síntomas de su pareja embarazada. Imagínalo por un momento y piensa si te antojaría experimentarlo.

A modo de corolario, la sexualidad no es sólo genitalidad; pues se pueden brindar demostraciones afectivas y caricias, sin llegar necesariamente al coito, pero si se les antojara, y el vientre ya estuviera muy crecido, conviene que el hombre actúe con cuidado, y practicar la posición de cucharita, es decir, penetración a la vagina desde la parte posterior. No obstante, se pueden brindar caricias sin llegar a la penetración, en fin, todo se puede hacer, basta con que hagan de cuenta que será un concierto para dos intérpretes, sólo que será ella quien deba llevar la voz cantante.

Bibliografía
  • Beach FA, Ford CS: Conducta sexual. España, Editorial Fontanella, 1978:235–239.
  • Delfín Lara Francisco. ¿Y te acostaste con él? ¿Y la amas?. Sexualogía. http://sexualogia.com/?s=y+te+acostaste
  • Meireluci Costa Ribeiro, Marco de Tubino Scanavino, Maria Luiza Sant’Ana do Amaral, Ana Lúcia de Moraes Horta & Maria Regina Torloni. Beliefs About Sexual Activity During Pregnancy: A Systematic Review of the Literature. http://dx.doi.org/10.1080/0092623X.2017.1305031
  • Díaz Esponda Carlos. Comunicación personal. 2004
  • Sloan D, Bing E: Sexo durante el embarazo. Mundo Médico 1984;XI(126):141–142.
  • Tüllmann A: Vida amorosa de los pueblos naturales. Comportamiento sexual de las comunidades primitivas. España, Círculo de Lectores, 1971:225.

Coito no consumado

Por Francisco Delfín Lara.        Octubre 16 del 2020

Prefiero denominarlo así en vez de “Matrimonio inconsumado” porque puede ocurrir en personas que no están casadas.

El coito no consumado hace referencia a aquellas parejas en las que no ha ocurrido la penetración del pene en la vagina. Aunque parezca increíble he tenido muchos consultantes con esa problemática, la pareja más longeva que he atendido con éxito, llevaban 19 años de casados Aunque UD no lo crea.

La revisión de esos casos muestra que con gran frecuencia la información recibida en sus primeros años estuvo plagada de sentencias condenatorias respecto a lo sexual; velada en ocasiones, aunque en otras, directamente se les dijo: Esas cosas son pecaminosas; los discursos crípticos menudeaban y su confusión dejaba un halo de temor.  De igual forma, abundaban los mensajes estigmatizantes, donde con índice de fuego se  etiquetaban como perversas a quienes se atrevieran a tener relaciones sexuales fuera de lo establecido; por ello introyectaron que excitarse era algo no sólo de mal gusto, sino denigrante y evidente signo de perversión. Jamás escucharon que las relaciones coitales produjeran placer a Las mujeres decentes.

***  con ánimo edificante o mejor dicho adiestrador y amenazante, fueron instruidas para considerar al primer coito como un evento desagradable, pero por encima de todo brutalmente doloroso. Convencidas de que sus madres notarían de inmediato cuando ellas tuvieran cualquier tipo de contacto sexual, casi no incursionaron por el ámbito de los noviazgos; la mayoría señala que eran consideradas como Señoritas buenas pero sobretodo Muy serias. Creían que la pérdida del himen (suceso imperdonable) constituía una experiencia vergonzante, capaz de convertirlas en mujeres sin valor alguno, por lo cual  a partir de tal contingencia, nadie las apreciaría.

*** El parto era pintado como un evento donde a la mujer poco le faltaba para morir; por ello rehuían la más leve probabilidad de embarazo. Para que llegaran a ser Jovencitas bien portadas se les sometió a una estricta vigilancia. Los deseos de toda adolescente debieron reprimirlos pues chocaban con lo aprendido a lo largo de la vida.

El abuso sexual en la infancia fue algo bastante frecuente en estas mujeres; solían no comentarlo y aquellas que lo hicieron o no les creían o las culpabilizaban independientemente de su edad. Muchas de ellas, pasados los años se sentían culpables de tales eventos.

***Estas mujeres suelen presentar algo denominado como vaginismo (la contracción involuntaria y dolorosa del tercio externo de la vagina), por  lo  común, tanto la educación recibida como los eventos de violencia sexual son los factores que lo determinan y por extensión del coito no consumado, por eso Leiblum dijo (1995):

“El vaginismo primario tiende a tener etiología psicológica”.

Leiblum, 1995

Puesto que la mujer tiene en mente que la relación coital es un evento no sólo pecaminoso sino altamente dañino, su cuerpo evitará todo tipo de acción que tenga tal propósito. La creencia de dicho dolor hará que su cuerpo se tense, y con ello cualquier aproximación a las zonas genitales generará más tensión y por tanto aumento de la sensación dolorosa. Debe quedar claro que todo ello es involuntario.

***Quizá parezca increíble que a estas alturas del siglo XXI, existan mujeres que lleguen a la relación sexual, sintiéndose víctimas propiciatorias para un sacrificio, pero las hay porque fueron programadas para considerar que el dolor sería al menos, terrible.

Aunque menos común, la no consumación de la cópula se da porque él presenta: disfunción eréctil; discontrol eyaculatorio (eyaculación precoz); homosexualidad o aversión sexual, sin embargo, lo cotidiano es que la causa sea femenina, y también existen casos donde ambos miembros de la díada tienen problemáticas sexuales.

Cuando después de vencer innumerables obstáculos llegan a ese primer encuentro sexual, si el varón es tan inexperto como ella, sus bruscos acercamientos, confirmaran sus expectativas en torno a que se trata de algo desagradable a más de doloroso. Una escena contada casi de la misma forma por estas féminas es que tendidas boca arriba con las piernas juntas aceptaron que él intentara la temida Desfloración pero tan pronto intuyeron la proximidad del Miembro viril (como dicen los abogados) arquearon el cuerpo, cerraron los muslos; la vagina se contrajo aún más y recularon, (en el más amplio sentido del término), expresando evidentes muestras de dolor. Como el inexperto galán no deseaba dañar a su pareja se retiraba y procuraba calmarla, para más tarde intentarlo de nuevo. No obstante, lo más factible es que la escena se repitiera, ad nauseam.

***Cuando este evento sucedía durante la Luna de miel, la situación se tornaba más compleja porque se sentían compelidos a cumplir con una obligación pero, el impacto emocional experimentado por él, al ver a su pareja sufriendo, le llevaba a postergar los encuentros. Pena, enojo, decepción, frustración y vergüenza fueron sólo algunos de los sentimientos y emociones que permanecieron ocultos bajo el manto de la confusión. Casi en automático, establecían una especie de pacto secreto: postergar los intentos hasta llegar a su casa.

Pero el arribo al nuevo hogar no garantizaba que las cosas se remediarían. Aunque no analizaremos a aquellas parejas que llegaron a vivir a casa de los suegros, es fácil imaginar que el asunto se complicaba mucho más. Con el pasó del tiempo los encuentros se espaciaban pero, debe quedar claro que la falta de penetración, no necesariamente, significaba ausencia de placer, pues la mayoría de esas parejas son capaces de alcanzar altos grados de excitación y llegar al orgasmo, salvo para algunas mujeres que padecieron abuso sexual en su infancia. Lo anterior es entendible, pues si la dificultad es penetrar, todo lo demás se puede hacer, por ejemplo: brindarse caricias y más caricias siempre y cuando no ronden las cercanías de la vagina, porque de inmediato ella se tensará.

***Pocas parejas se atreven a solicitar ayuda, pues creen ser las únicas en padecer esta situación sintiéndose avergonzadas. Suele ser la mujer quien primero abra la problemática ante un familiar, una amistad o un profesional de la salud y es que en ellas, su preocupación es mayor pues el reloj biológico es inclemente, es decir, la capacidad reproductiva tiene una menor duración que la de un hombre. La gente que les rodea, no cesa de interrogarles: ¿Ya encargaron? ¿Cuándo llegara la criatura? Conforme las excusas se van agotando, se angustian y eso puede propiciar que se movilicen en busca de asesoría.

En el coito no consumado pueden coincidir varias disfunciones pero resalta lo negativo que puede resultar una educación tan restrictiva, llena de ignorancia y prejuicios. Es evidente que en la mayoría de estos casos, la información, educación y programación sobre sexualidad recibida o más bien padecida estuvo llena de prejucios y falacias.

Anteponer el pecado al placer, es algo inaudito y deja mucho que desear, sobretodo para quienes aseguran anhelar que sus descendientes sean personas responsables y vivan de la mejor manera. De ser cierto lo anterior tendríamos que comportarnos de manera íntegra, honesta y congruente, aunque siempre he dicho que hacer discursos es fácil, lo difícil es vivirlos.

***Hay una frase que me estremece de “Los hermanos Karamazov”, obra escrita por Fiodor Mijáilovich Dostoyevski, considerado como uno de los más grandes escritores de todos los tiempos y uno de mis favoritos, la cual dice lo siguiente:

“Todos somos culpables para con todos…
y yo más que todos”.

Esto me parece pertinente para el tema de hoy aunque en vez de culpables prefiero usar responsables, y es que lo que sucede con estas parejas es responsabilidad de la sociedad en la que viven, es decir, la nuestra.

La Educación Integral de la Sexualidad debería de impartirse en TODOS los recintos escolares, sin embargo, existen personas que aseguran que esa responsabilidad le corresponde sólo a los progenitores, valdría la pena averiguar si:

¿de verdad padres y madres de este país tienen conocimientos objetivos, actualizados y libres de prejuicios para educar a sus descendientes en lo relacionado con la sexualidad? Me ayudaría mucho tu respuesta sincera referente a ti y por supuesto lo que piensas respecto al resto de padres y madres.

Igual tenemos responsabilidad quienes nos desempeñamos en los ámbitos de la Sexualogía, porque pese a nuestros esfuerzos hemos avanzado menos de lo que quisiéramos.

Quienes se dedican a la política y cuestiones empresariales igual tienen responsabilidad por la forma en que actúan para conseguir lo que quieren sin importarles lo que suceda con la ciudadanía.

Y yo soy responsable, porque seguramente puedo esforzarme más para hacer llegar, que no imponer, mis ideas a otras personas para que las escuchen, sopesen y decidan, conscientemente, qué hacer y cómo vivir su sexualidad con placer y respeto para si y para el resto de la gente.

Coadyuvar a que estas parejas consuman su unión es una de las empresas más satisfactorias que he tenido.

Como dato curioso, o más bien indignante les comento que durante años, su propusieron intervenciones quirúrgicas para ensanchar el orificio vaginal, pues les resultaba más fácil abrir y escindir que escuchar a un par de seres humanos que padecieron los embates de la mojigatería y el conservadurismo.

NOTA: Sugiero no cambies de religión, pero que te atrevas a escuchar en este mismo espacio “El dios de Spinoza”.

Bibliografía:
  • Delfín, Lara, Francisco. Todos pueden menos yo, en Sex populi. Secretos y testimonios sobre sexualidad. Editorial Norma. México, 2004. 183-192.
  • Leiblum, Sandra, R. y Rosen, Raymond, C. case Studies in Sex Therapy. The Guilford Press. USA, 1975: 251.

Virginidad

Por Francisco Delfín Lara.        Septiembre 9 del 2020

Desarrollo de este tema porque mi amigo José Antonio Ezquerra me compartió un artículo en el que se afirma que Francia irá en contra de los “certificados de virginidad”. Suena raro que a estas alturas todavía se preocupen, presionen, exijan y maltatraten por eso…

Antes de entrarle de lleno al tema me fui al diccionario, libro maravilloso donde cada palabra está en su lugar, incluso desorden.

Virginidad: Estado de virgen; pero como seguía igual, retorcedí un poco y hallé:

Virgen: En su primera acepción: Persona que no ha tenido relaciones sexuales.

En su octava acepción dice: Dicho de una cosaQue está en su primera entereza y no ha servido aún a aquello que se destina (2001. Diccionario de la lengua española).

Vaya, vaya esto es digno de ser analizado, seguro debe referirse al aceite de oliva, porque me hace mucho ruido eso de no ha servido aún a aquello que se destina, pero más allá de inocencia, ingenuidad, candor y pureza que es lo primero mencionado por mucha gente, en realidad se refieren a quien no ha tenido relaciones por la vagina, es decir, pudo haber tenido relaciones orales o anales, pero si ha evitado la penetración vaginal seguirá siendo virgen, de acuerdo a las creencias tradicionales. Cuanta razón tuvo Gloria Trevi al cantar:

Tengo una amiga
que ya lo hizo
como con diez
pero a todos les dice
qué es su primera vez.

Se antoja creer que esto ya no es tan importante, que sucedió en un pasado muy lejano pero ¿Será que en la actualidad las mujeres son más destrampadas que antaño, o dicho de otra manera mas dueñas de si mismas?

¿Será que nuestras antepasadas tuvieron su primera relación sexual, hasta la noche de su boda? Capaz que si, pero aquellas abuelas que se abrieron de capa con sus nietas parecieran decirles pícara y sabiamente: Hijita hay que guardar las apariencias.

¿Cómo sabían si era virgen?

Mucho tiempo esta pregunta taladró la mente de algunos hombres, para fortuna o mas bien desgracia de ellos, nunca faltó la opinión del sexperto de la secundaria, ese que llevaba la camisa desabotonada y que con cigarro en mano afirmaba: “si la chava corre con las puntas de los pies hacia afuera ya no es; mírala por detrás cuando use pantalones, y si tiene un hueco en la entrepierna, tampoco es”. Dejamos de creerle cuando dijo “La invito a nadar, la cargo y me meto poco a poco a la alberca bajando escalón por escalón, pero si al entrar al agua veo que le salen burbujas entre las piernas la suelto porque seguro ya no es virgen”.

La manera más sencilla de saberlo es preguntarle pero

¿Para qué quiero saberlo?

¿Cuál es la relevancia?

¿Por qué, ella, debía llegar virgen al matrimonio? porque el varón consideraba que los hijos de ella serían, forzosamente de él. Razonamiento simplista porque según el Filósofo del Pueblo, cuando alguien dice: Ella es mi madre, ESTAMOS ANTE UN HECHO CIENTÍFICO, en cambio cuando alguien dice: Él es mi padre, ESTAMOS ANTE UN ACTO DE FE.

¿Por qué, él, no  debía llegar virgen al matrimonio? Porque cuanto más tardaba un varón en tener relaciones sexuales, mayores eran las dudas en torno a su hombría. Por otra parte, en la mayoría de las sociedades se esperaba que el varón fuera un Sexperto, aunque en honor a la verdad no le brindaban las herramientas para conseguirlo. La cuestión del género se constituye como el eje central de la virginidad pues el hombre debutaba, casi, casi para el público, entre más gente se percatara que ya había dejado de serlo mejor. En cambio, ella lo hacía para sí misma y no le interesaba que los demás se enteraran.

¿El himen es garantía de que ella no ha tenido  relaciones sexuales? Esta estructura no siempre la tienen las mujeres y sus dimensiones pueden ser tan pequeñas que no sangre en el primer contacto con el pene o algo similar; igual pueden ser unas cuantas gotas y no los ríos esperados por muchos. Como dato curioso Velázquez afirma que el Himen artificial: es una prótesis creada para simular un himen intacto, de plástico o albúmina, de 5 x 7 cms. el cual en uno de sus lados tiene tinta obscura para simular la sangre durante el coito. Se ha utilizado en algunos países para preservar el honor de la joven o de su familia (2012. Velázquez et al). Trucos o estrategias para evitar reclamaciones, imagino le sugieren se queje de dolor y simule que no está disfrutando, para no levantar sospechas, conviene que él se identifique con el difunto José José y diga:

“Soy tu primera vez,
Soy quien te hizo mujer”.

Imposible saber que era ella antes, pero a partir de que él la penetró se convirtió en mujer.

Si no sangró no era virgen. De acuerdo al párrafo anterior esta frase es un PREJUICIO que por desgracia sigue vigente. Óscar Chávez  Lanz e Isabel Vieyra encontraron en el antiguo D. F. que 58.8% de 350 mujeres, no sangraron en su primera relación sexual. Tú puedes obtener tus propias estadísticas, pregunta a las mujeres que conozcas ¿Sangraste en tu primera relación? Pero tiene que quedarle muy claro que es la “Primera vez” y no la “Noche de bodas” porque son dos eventos muy diferentes, aclarado lo anterior, contabiliza los resultados y de seguro te llevarás una sorpresa.

Entre los mexica, según Noemí Quezada: Si la joven era virgen, los padres al cuarto día mostraban cántaros enteros o sacudían la estera manchada frente a los parientes; de no serlo presentaban vasijas horadadas y podía el marido repudiar a la mujer, regresando ella a casa de sus padres. La vergüenza recaía sobre toda la familia y la comunidad.  Esto no es cosa del pasado pues entre los turcos a decir de Duyan: Las novias que no sangran en su Luna de miel pueden enfrentar crueles consecuencias como: rechazo, ridículo y violencia. Eso no acontece sólo en aquellos lares; hace 22 años, Amuchastegui realizó una interesante investigación con personas de Oaxaca, Guanajuato y la Ciudad de México y señaló:

“Los informantes afirmaron a menudo que el hombre tiene el deber, y también el privilegio, de comprobar la virginidad de su novia como signo de calidad moral y de su propia virilidad. Los padres serían responsables de la reputación de la joven y heredarían esta responsabilidad al marido” .

Amuchastegui, 1998.

Es evidente que se trataba a la mujer como una posesión, como un objeto en vez de como un sujeto. Este año en Francia, la Ministra para la Ciudadanía Marlêne Schiappa propone “penalizar a los que extienden esos  certificados, y eventualmente, también a los que los piden, como los padres” (2020. Ayuso). Se refiere a que algunos médicos/as extienden certificados donde constatan la virginidad de la mujer, lo cual aun es muy importante para algunos grupos culturales, por más que nos parezca indignante.

El coleccionista. Abundan hombres que se ufanan de haber desvirgado una gran cantidad de mujeres, semejan al Señor Feudal de la Edad Media, que practicaba el: Ius primae noctis: esto es desfloraba a la novia. Entre los romanos, según cuentan: Tertuliano y San Agustín existió un dios con forma de pene llamado: Mutunus Tutunus, sobre el cual debía sentarse la novia, quizá para librar al futuro esposo de los peligros de su sangre.

Las personas afines a la tradición patriarcal, suelen identificar a las mujeres inmaculadas o puras por la mácula sanguinolenta que dejan en la sábana después de su primer coito. Pero luego de enterarnos de lo equívoco de tales actitudes vale la pena que cada quien reflexione al respecto y actúe en consecuencia. No se trata de hacer una apología a tener relaciones coitales sin ton ni son, más bien es una invitación a pensar en las probables consecuencias de nuestros actos.  Las verdadera valía de la mujer o del varón no reside en haber o no tenido relaciones sexuales; el que sangre o no es independiente de sus rasgos: positivos o negativos. 

Dejar de ser virgen o tener la primera relación sexual es una decisión personal que resulta preferible realizar cuando se conocen las probables consecuencias de tal acto y no hacerlo,  por ceder a presiones externas.

El maestro Renato Leduc decía:
“Llanto que derramaste, amargo llanto
ira, dolor, remordimiento, espanto …
lo que perdiste no era para tanto”.

La importancia a la primera relación sexual de la mujer tiene siglos, y es que preocupaba a los progenitores que su hija no perdiera valor a lo hora de casarse, infinidad de mujeres sintieron que ofendían a sus padres por haber tenido relaciones prematrimoniales, y los padres hacían tremendos dramas porque sus hijas habían deshonrado su hogar, pero ¿a quién se le ocurre colocar la honra de la familia entre las piernas de las hijas?

Más que programarlas para que copulen cuando nosotros lo autoricemos, vale la pena educarlas y apoyarlas para que aprendan a tomar decisiones de forma responsable. ¿O tú qué piensas?

Bibliografía:
  • Amuchastegui Herrera Ana. La dimensión moral de la sexualidad y de la virginidad en las culturas híbridas mexicanas. Relaciones 74. Primavera 1998. Vol. XIX.
  • Ayuso Silvia. Francia declara la guerra a los “certificados de virginidad”. El País. Octubre 5 del 2020.
  • Bardet, J.P. et al. La primera vez o la novela de la virginidad perdida, a través de los siglos y los continentes. Editorial Planeta. España, 1981.
  • Chávez Lanz Óscar y Vieyra Isabel. Comunicación personal. México, 2004.
  • Delfín, Lara, Francisco. Luna de m(h)iel. En: Sex populi. Editorial Norma. México, 2004.
  • Diccionario de Lengua Española. Tomo 10. Editorial Real Academia Española. España, 2001.
  • Duyan, Veli y Gulsum, Duyan. Turkish social work students’ attitudes toward sexuality. Sex Roles: A Journal of Research. May, 2005.
  • Quezada, Noemí. Sexualidad, amor y erotismo. México Prehispánico y México Colonial. Editado por: UNAM y Plaza y Valdés. México, 1996.
  • Tüllmann, Adolf. Vida amorosa de los pueblos naturales. Editorial Círculo de Lectores. España, 1971.
  • Velázquez Nelson, Birñez Noramaikas y Delgado Roxana. Himen. Rev. Obstet. Giencol Venez. No. 1 Caracas mar. 2012

¿Homo sapiens sapiens?

Por Francisco Delfín Lara.        Septiembre 1 del 2020

Acepto que nuestra especie ha alcanzado logros impresionantes, como el podernos comunicar a grandes distancias, practicamente de inmediato, por ejemplo durante esta pandemia; igual numerosos investigadores trabajan a marchas forzadas para conseguir una vacuna que logre frenar los efectos del COVID-19, al mismo tiempo una gran cantidad de personal médico y paramédico trabajan largas jornadas para atender a quienes requieren hospitalización. Resulta difícil entender porque hay tanta gente que se resiste y se opone a seguir las instrucciones más elementales, para disminuir la probablidades de contagio, y no me refiero a quienes DEBEN salir a trabajar, sino a otras personas que se arriesgan y ponen en riesgo a muchas más; aunque ya se ha visto que el virus no respeta jerarquías y llega incluso hasta jefes de estado.   

La Ciencia y la Tecnología avanzan a pasos agigantados, al menos en otros países, me parece injusto a más de absurdo las trabas que se le imponen a estos dos pilares del desarrollo. Ya es tiempo de que en México se apoye a quienes se desempeñan en esos terrenos pues nos permitirían grandes avances, mucho ahorro y hasta entrada de divisas, ya que dejaríamos de importar tanto y podríamos exportar inventos realizados aquí.

Pero volviendo a nuestra pomposa denominación, una gran cantidad de personas considera que los seres humanos somos únicos, que somos el acmé de todo lo vivo, que fuimos creados ex profeso,  con la misión de dominar a todo lo existente, al menos en este planeta, bueno en el sistema solar, eso si de momento. Por difícil que parezca aun existen personas que se resisten a aceptar nuestra herencia filogénética, es decir, que tenemos antepasados comúnes con el resto de los seres vivientes. Les afrenta, según ellos tener un origen tan humilde, no soportan que podamos compartir material genético con otras especies, pues aseguran poseer una estirpe divina.

Hay una anécdota que no tiene registros oficiales, de ella se sabe por lo publicado en varios periódicos de la época, y por comentarios de varios individuos que estuvieron prensentes en dicho evento. Se cuenta que allá por 1860 en un debate sobre la Teoría de Charles Darwin, se suscitó un intercambio de ideas entre el Obispo de Oxford Samuel Wilberforce (defensor de la Teoría Bíblica) y Thomas Huxley a quien apodaban “El bulldog de Darwin” porque lo defendía de los ataques a que era sometido con gran frecuencia; en un determinado momento ocurrió el siguiente intercambio de palabras:

“Si se me permite preguntar”, dijo el obispo de Oxford, “¿preferiría UD tener un simio como abuelo o abuela?” “Preferiría tener simios en ambos lados como antepasados”, respondió el naturalista ‘antes que seres humanos tan deformados por los prejuicios, que tienen miedo de contemplar la verdad’ (2017.England). Fin del episodio. Quiérase o no, en nuestras sociedades los prejuicios campean a sus anchas, pero lo mas riesgoso acontece cuando se tratan de imponer al resto de los mortales.

Recordar esta anécdota me hizo caer en la cuenta de cuanto ha cambiado la forma de debatir, si revisamos lo sucedido hace 200 años se trató de un diálogo pues el Obispo de Oxford dijo algo, a lo cual respondió Thomas Huxley (tío de Aldous Huxley), esto significa que ambos se escucharon, para poder responder. En cambio, los contendientes a la presidencia del vecino país del norte, más que ideas, intercambiaron  epítetos. Para aprender a como no dialogar, basta con que vea UD un programa sobre deportes donde los comentaristas, que rara vez actuan como tal, se dedican a elevar la voz para no permitir que los demás digan algo ¿El afán de insultar será muestra de incapacidad de dialogar? Conste que es pregunta.

No obstante, llegado a este punto reflexiono si Freud me asesoró porque de acuerdo a la tercera acepción del Diccionario de la Lengua Española (RAE), epíteto significa “expresión calificativa usada como elogio o, más frecuentemente, como insulto”. Pero en Biología. Epíteto sería algo así como el nombre específico de la especie, (All you need is Biology ) por ejemplo Homo sapiens, donde sapiens, es el epíteto. Les remito a checar cómo se llama esta grabación.

Este preámbulo se relaciona con que igual en el terreno de la sexualidad, mucha gente afirma que somos muy diferentes al resto de los animales porque la mujer no necesita estar en estro, celo o brama para tener relaciones sexuales, es decir, las puede tener cuando quiera, bueno para ser sinceros, eso de cuando quiera solamente es desde el punto de vista teórico.

Sin embargo, lo antes mencionado no es tan exacto porque entre los bonobos (Pan paniscus) una de las dos especies de chimpancé:

  1. La hembra puede copular aunque no esté en celo.
  2. Se ha observado que pueden tener encuentros sexuales en la posición, cara a cara.
  3. Pueden ser ellas quienes propongan la actividad sexual y no esperar a que su pareja lo haga, al parecer no pasa por su mente aquello de “¿Qué pensará de mi”.
  4. Indudablemente ponen en práctica aquello que proponíamos allá por los años sesentas del siglo pasado “Haz el amor no la guerra”, porque a diferencia de los chimpancés (Pan troglodytes) que son bastante agresivos incluso con miembros de su mismo grupo, entre los bonobos cuando pudiera darse una situación tensionante, como puede ser la comida, tienden a acicalarse, acariciarse, simular la cópula o copular pero no pelean.
  5. Los encuentros sexuales antes descritos pueden ser hembra con macho, macho con macho o hembra con hembra, y también lo hacen sin que importa la edad de los participantes.
  6. Afirman algunos investigadores que los grupos son dirigidos por hembras, las cuales no permiten que ningún macho se violente contra alguna de ellas, pues en caso de intentarlo entre varias lo tranquilizarían o ¿será mas exacto decir, someterían?
  7. Al parecer la dirigencia femenina de los grupos disminuye la agresividad a diferencia de lo que acontece entre los chimpancés.
  8. Takeshi Furuichi, un primatólogo de la Universidad de Kyoto que lleva cerca de 35 años viviendo en la selvas de la República Democrática del Congo, estudiando el comportamiento de chimpancés y bonobos, dice que estos últimos ocupan 3 horas del día buscando comida y haciendo sus camas, el resto del tiempo lo pasan relajándose, durmiendo y jugando. Es aceptable a más de entendible cualquier manifestación de envidia.

Me uno al duelo de Mafalda, Felipe, Manolito, Susanita, Miguelito, Guille, sus progenitores y claro el Mundo; partió Quino pero nos legó páginas llenas de enseñanzas dignas de ser puestas en práctica.  

Cuando hice mi escrito sobre los bonobos en 2011 me preguntaba

¿Qué podemos aprender de los bonobos?

Y Furuichi se pregunta “¿Somos realmente tan inteligentes como creemos que somos?

Ahí están las preguntas y Oj-Allah añadas tus respuestas en los comentarios de esta página, capaz que nos ayudan a ser mejores seres humanos y por ende a convivir de forma más armónica.

Bibliografía consultada:
  • All you need is Biology. https://allyouneedisbiology.wordpress.com/tag/epiteto-especifico/
  • Delfín Lara Francsico. Aprendiendo de los bonobos. Divorcio. Año 1. No. 3. 2011
  • Diccionario de la lengua española. https://dle.rae.es/ep%C3%ADteto?m=form
  • England Richard. CENSORING HUXLEY AND WILBERFORCE: A NEW SOURCE FOR THE MEETING THAT THE ATHENAEUM ‘WISELY SOFTENED DOWN’. NOTES AND RECORDS. (2017)71, 371-384.
  • EurekAlert. What can we learn from bonobos and chimpanzees? Dec 9. 2019
  • Furuichi Takeshi. Bonobo and Chimpanzee. The Lesson of Social Coexistence. Springer. http://www.springer.com/series/8796
  • Vigilant Linda. Bonobos. Current Biology. Vol. 17. No.3

De sexo ya lo sé todo

Por Francisco Delfín Lara.        Septiembre 24 del 2020

Ignoro a quién se le ocurrió el nombre para este Conversatorio al que me invitó GENDES en junio del año 2019, pero es muy interesante, porque muchos conocidos míos, dicen “Yo me las sé, de todas todas”.

Al transitar por la vida y al enfrentarnos a la realidad es posible que cometamos errores, que al solucionarlos nos permite decir que hemos ganado experiencia. No obstante, con respecto a la sexualidad las cosas son distintas y los aprendizajes se dan de manera diferentes. En el caso de los hombres sucederá cuando tengamos el valor para quitarnos la capa de soberbia y reconozcamos que la pareja expresa cosas, sobre nuestra actuación o desempeño sexual, que pueden ser muy diferentes a las que imaginábamos.

El problema es que a veces lo hace sin palabras, no obstante, el remedio está en comprender eso que llaman la comunicación no verbal, para lo cual conviene:

  1. Imitar a Sócrates en aquello de “Yo sólo sé que nada sé”. Actuar de esa forma no resulta sencillo para el hombre, pues desde la más tierna infancia se me dijo que debo ser el mejor de todos, que siempre debo de triunfar sin importar el modo como lo haga. Al adoptar esta estrategia podría averiguar qué le gusta, qué le agrada y tratar de complacerla, en vez de usarla para mi sola satisfacción.
  2. Tener paciencia, por ejemplo evitar la rápida retirada después de hacer el amor, disfruta el permanecer junto a ella de modo que las pieles se complementen. Cabe aclarar que no cuentan aquellos individuos que permanecen inmóviles como un santo varón, pues después de eyacular, y que apenas alcanzan a decir: “Buenas no…”.
  3. Adoptar un espíritu de aventurero para explorar, con toda la calma, el mapa erótico de mi pareja, esto es su piel, qué tal recorrerla centímetro a centímetro . La prisa tan practicada por muchos varones es mala compañera; tratándose de caricias conviene imitar al gran filósofo mexicano, Julio César Chávez cuando decía “Más vale dar que recibir”.
  4. La compañera agradecerá tocamientos en todo el cuerpo, me atrevo a afirmar que una gran cantidad de mujeres: mataría por un faje con su compañero.

Quiérase o no, más hombres que mujeres le  brindan demasiada importancia a la erección, a la penetración y a la eyaculación para con ello dar fin a la función. Con inusitada frecuencia se afirma que 30% de los hombres eyaculan antes de que transcurra un minuto después de la penetración, de ser cierto, indudablemente esos coitos serían: MUY COITITOS.  Sin embargo, la cosa no es tan sencilla; pues no es sólo cuestión de tiempo, dado que intervienen muchos factores como: primeras experiencias sexuales, frecuencia de las relaciones sexuales, angustia, confianza, problemas de pareja,  y la sensación de haber terminado muy pronto, entre otros (2006.Althof).

En la Encuesta Mundial de Sexualidad en línea para usuarios de Internet de habla árabe en el Medio Oriente realizada en el 2011, a la pregunta de ¿Con qué frecuencia eyacula antes de querer eyacular?”

Si conocen a alguien que se ufana diciendo “Todo el tiempo me la paso pensando en el sexo”, la Dra. Terry Fisher de la Universidad de Ohio diría que tienen razón, ella encontró en una investigación que los hombres tienen cerca de 19 pensamientos al día sobre el sexo; en contraste las mujeres tuvieron 10 en el mismo lapso. “Por supuesto” dirán muchos hombres con una sonrisa de oreja a oreja, pero su cara cambiará ante el comentario de mi tía Brígida Cienfuegos “Ese, ese es el verdadero problema de los hombres: PENSAR EN EL SEXO, SÓLO PENSAR”. El que entendió entendió.

Lo anterior coincide con una añeja afirmación mía: “Los hombres en este país practican con mucha frecuencia el sexo oral, si porque se la pasan hablando”.

Arthur Miller extraordinario novelista estadounidense afirmaba: “Los hombres temen al sexo más que las mujeres”, de acuerdo, pero ello obedece a las cargas o mandatos que desde siempre nos han endilgado a los heterosexuales para ser unos VERDADEROS HOMBRES, en otras palabras un SEXPERTO, aunque en realidad nadie nos haya enseñado algo al respecto.

Otra cuestión que también nos fastidia es que a una inmensa cantidad de varones “Les intimida la intimidad”. Consideran que deben mantenerse herméticos y no compartir sus más íntimos secretos, vicisitudes, penas y tristezas, macro error.

Otros dicen que son infieles y que son incapaces de hacer algo al respecto, porque la poligamia es natural. Su argumento me lleva a recordar a aquel varón que terminó de hacer el amor, besó a la mujer en los labios, con brusquedad se levantó de la cama, “como en las películas francesas”. Sentado en una silla fumó con calma un cigarrillo, “como en las películas francesas”. Se vistió cuidadosamente pero sin anudar la corbata, “como en las películas francesas”. Salió sin despedirse y sin mirar a la mujer, “como en las películas francesas”. Subió a su pequeño carro, manejó a toda prisa pero con gran habilidad, “como en las películas francesas”. Se estacionó frente a su casa, asegurándose de cerrar bien el auto, “como en las películas francesas”. Con sumo cuidado y sin hacer ruido abrió la puerta de la entrada, “como en las películas francesas”. Subió los escalones uno a uno y se dirigió a la recámara principal, “como en las películas francesas”. Abrió la puerta y vio a su esposa en pleno trance amoroso con otro hombre, “como en las películas francesas”. Todo este relato para enfatizar que lo que él haga, capaz que su pareja también puede hacerlo. Sólo que ella no lo comentaría.

Llegados a este punto conviene reflexionar si la monogamia o la poligamia son potencialidades naturales, para después decidir qué es lo que quiere hacer con tal potencialidad.

Y hablando de infidelidad, algo que suele comentarse al parejo son los celos, pero me llama la atención que con frecuencia se expresan de manera distinta porque ante la duda ella dirá: “¿Y la amas?”

En cambio él dirá: “¿Te acostaste con él?”

Lo dicho antes se relaciona en forma estrecha con las preocupaciones relacionadas con el género, es decir, con lo que la sociedad nos ha nutrido desde siempre, tanto a hombres como a mujeres. Sin embargo, eso significa que si lo aprendimos podemos hacer una revisión para desaprender aquello que nos fastidia y aprender cosas que nos permitan vivir de una manera más armónica.

En fin son ideas que considero pueden invitarnos a pensar, y aunque nuestras conclusiones sean distintas, son valederas. Lo importante es PENSAR y actuar en consecuencia.

Bibliografía:
  • Althof Stanley. The Psychology of Premature Ejaculation: Therapies and Cosequences. The Jorunal of Sexual Medicine. Vol. 3. Suplemment 4. P:324-331. Septmeber 01, 2006.
  • Shaeer Osama & Kamal Shaeer. The Global Online Sexuality Survey (GOSS) Ejaculatory Function, Penile Anatomy, and Contraceptive Usage among Arabic-Speaking Internet Useres in the Middle East. The Journal of Sexual Medicine. Vol. 9. Issue 2. P:425-433. Februrary 01, 2012.

Disfunción eréctil o “Se me para, luego existo”.

Por Francisco Delfín Lara

Se me ocurrió la irreverencia de parafrasear a Descartes porque una gran cantidad de hombres cuando tienen problemas con la erección del pene se siente tan, pero tan mal que se alejan de su pareja, temerosos de que cualquier demostración de afecto o cariño la interprete ella como una invitación a tener relaciones sexuales y, como saben que fallarán, optan por emprender, la no tan graciosa huida. La pareja heterosexual desconcertada, elaborará hipótesis, del tipo:

  • Ya no me ama,
  • No le gusto porque he subido de peso,
  • Debe andar con otra,
  • ¿Estará enfermo?
  • ¿Y si es homosexual?

Por cierto, la disfunción eréctil no respeta orientaciones o preferencias sexuales, esto es la pueden padecer: homosexuales, heterosexuales y bisexuales.

Durante mucho tiempo se conoció como impotencia, no obstante, conviene recordar que desde 1992 se le nombra como Disfunción eréctil y se definió como: Inhabilidad para alcanzar o mantener la erección del pene lo suficiente para un desempeño sexual satisfactorio. (NIH Consensus Statement 1992).

Las fallas en la erección minan la autoestima de muchos hombres, sus relaciones interpersonales y por encima de todo su masculinidad. Se trata de un problema de salud pública, de acuerdo a diversos estudios internacionales.

  • En el 2005, según la Asociación Española de Urología, de dos millones de españoles cuyas edades fluctuaban entre 40 y 50 años con DE, menos del 30% solicitaron consulta. ¿será que los mexicanos si lo hacen?
  • Muchos hombres consideran que la DE es algo inherente al envejecimiento y por tanto … se resignan a padecerla.
  • Hasta el siglo pasado se creía que la causa estos casos eran de origen psicológico; en la actualidad se afirma que en más del 80% de las veces se relaciona con los siguientes cofactores: diabetes mellitus, hipertensión arterial, obesidad, colesterol elevado, enfermedades cardiovasculares, alteraciones del endotelio y depresión. ¿Ya hizo sus cuentas? o mejor dicho ¿cuántos de estos cofactores tiene UD?

Fue en el Congreso Europeo de Medicina Sexual efectuado en Copenhage, Dinamarca en 2005 donde primero escuché que la DE podría advertir de un probable infarto del miocardio; esto tiene su lógica pues las arterias que vacían la sangre en los cuerpos cavernosos del pene son más delgadas o estrechas que las arterias Coronarias, las que oxigenan al corazón. Si no llega sangre a los cuerpos cavernosos se dificultará la erección pero si le falta sangre al corazón, puede sobrevenir un infarto. De modo que la DE y la presencia de otros síntomas justifican una visita a su médico, quien podrá canalizarlo con el internista o cardiólgo. En una investigación rumana, publicada en este año se consideró que los síntomas de la DE preceden 3 años a la enfermedad cardiovascular (2020.Diaconu et al).

Tienen mucha razón quienes señalan a manera de chiste que: Después de una falla en la erección el individuo experimenta miedo pero, si se repite la falla … le sobreviene el pánico. Esto viene a colación porque cuando no existe una causa orgánica la falla eréctil puede obedecer a:

  • Ansiedad de desempeño,
  • presiones de la pareja o
  • temor al fracaso.

A todo lo anterior debemos agregar las tensiones causadas por los problemas económicos; el individuo a quien no le alcanza el dinero para la manutención de su familia, o quien se jubiló, o aquel que perdió el trabajo y se encuentra irritable, que pierde el sueño y quizá en un intento por combatir su ansiedad aumente tanto la ingesta de alcohol como el consumo de cigarrillos, verá que igual aumentan los problemas con la pareja, y que su autoconfianza y autoestima se derrumban. Es muy factible que está gigantesca cuarentena con tantos desajustes también incida en el incremento de Disfunción eréctil.

El tema se puso de moda y en este 2020 una muy interesante investigación española reveló que de 147 videos que revisaron con los nombres: “Problemas de erección, Impotencia y Disfunción eréctil”, 37% de ellos estaban basados en evidencia científica, el 63% no estaban basados en evidencia científica, pero fueron los mas revisados (2020.Mazuecos et al). Es decir, lo que maneja la mayoría de los visitantes de esas páginas obtienen información poca seria y quizá hasta peligrosa. (2020.Mazuecos et al).

La substancia para el tratamiento oral de la DE fue descubierta por Serendipia, y tuvo un éxito de ventas impresionante, aunque lo más conveniente es que la prescriba un profesional de la salud,  para que pueda identificar la existencia de cofactores y atenderlos para erradicarlos, disminuirlos o al menos controlarlos. En resumen, no se trata solamente de que tome la pastilla para que se le pare el pene, conviene que la use para disfrutar la sexualidad junto con su pareja.

En el 2008 hubo una iniciativa, en el antiguo Distrito Federal para que se entregara una pastilla de éstas a hombres mayores 70 años, digan lo que digan las conciencias puritanas que pretenden guiar nuestros comportamientos, esa iniciativa me pareció un acierto pues les permitiría ejercer su erotismo, que como bien sabemos nos acompaña a lo largo de nuestra existencia. Los adultos mayores tienen derecho al placer aunque les vendrían de perlas unas clases sobre “Como enriquecer su erotismo” y Prevención de Infecciones de Transmisión Sexual” porque esos padecimientos están a la orden del día, sobretodo para quienes no toman las debidas precauciones. Pero queda flotando en el ambiente una pregunta que puede estremecer a más de cuatro ¿Cuándo se hará algo semejante para las adultas mayores? o ¿será que a ellas no se les antoja hacer el amor?

A modo de resumen: La disfunción eréctil es más frecuente conforme el individuo envejece y si tiene alguno/s de los cofactores enunciados, que por desgracia en México abundan. Si pese a tratar los cofactores persisten las fallas en la erección se puede prescribir tratamiento farmacológico, después hablaremos de otras estrategias.

Pero es necesario hacer hincapié en que, si el individuo tendrá erección conviene brinde placer a su pareja en vez de usarla, solamente, para su satisfacción personal.

Bibliografía
  • Diaconu C., Manea M., Radu D., Socea B,. Dan Spinu A., Bratu O. The erectile dysfunction as marker of cardiovasulardisease: a review. Acta Cardiológica. Vol. 75. No. 4. 2020
  • Europa Press. Sólo un 25-30% de los hombres con disfunción eréctil acude a la consulta del especialista. Europa Press 2008. SEP
  • Lowenstein, Grover, S.  y Kaouche, M. y cols.  Prevalencia y factores de riesgo de disfunción eréctil. Archives of Internal Medicine. 166(2):213-219. Ene 2006.
  • Mazuecos J., Pedraza J., Lozano J., Baena C., lendinez G. y Medina R. Análisis de la calidad de la información sobre disfunción eréctil en Youtube. Archivos españoles de urología. Tomo 73. No. 6. 2020
  • Morales M. A., Meijide R.F., García G. J. I.,  Regadera A. J. L. y Manero F. M. Repercusiones psicológicas de la disfunción eréctil sobre la autoestima y autoconfianza. Actas Urol Esp V. 29 No. 5 Madrid, mayo 2005.
  • Propone diputado Viagra gratis para adultos mayores. El Universal.com.mx Mayo 6 de 2008.

Bésame mucho

Por Francisco Delfín Lara.        Grupo Interdisciplinario de Sexología. Septiembre 7 del 2020

Así se titula la canción que allá por 1940 escribió la compositora mexicana de 15 años, Consuelito Velázquez y que ha sido interpretada por artistas de fama internacional como: Pedro Infante, Nat King Cole, Andrea Bocelli, Avalon Jazz Band, Ray Conniff, Luis Miguel y hasta los Beatles por citar unos cuantos.

La súplica de la canción se refere a una caricia, ahora universal, no siempre fue así pues hubo épocas y sociedades en la que no tenían la más remota idea de su existencia, por eso cuando la contemplaron tuvieron expresiones de desabrobación y hasta de asco.

Dado que el tema es inagotable hablaremos de los besos relacionados con el erotismo.

Los esquimales y los habitantes de la isla de Bali practicaban una caricia que podría considerarse equivalente al beso y que los occidentales describían como frotar nariz con nariz; señal de que “las apariencias engañan” (Tüllmann). La realidad es que el individuo acercaba su nariz al rostro de la otra persona, para sentir tanto el calor como el aroma, una vez envuelto en la esencia de su pareja aspiraba suavemente, sin duda se trataba de una práctica deliciosa. Es factible que algún sujeto lo hiciera como en las películas al darse “un pericazo”.

Bronislaw Malinowksy, el fundador de la Antropología social nacido en Cracovia decía que en la islas de Trobriand practicaban una conducta semejante a nuestros besos, un nativo le comentó: “Ella mordisquea mi labio inferior y yo dejo que salga mi saliva para que la sorba”. Si alguna de las personas que escucha esto hace gestos de desagrado y desaprobación debo decirles, que de una u otra forma lo mismo pasa en los besos que UDS se han dado, sobretodo entre más apasionados y profundos hayan sido.

Jacinto Choza, comentaba que el beso puede relacionarse con el acto de dar de comer boca a boca como las aves, pero aclaraba que en nuestra especie es como dar vida, amor o afecto (2017.Choza). Suena muy bien, pero a mi juicio va más allá de expresar amor porque en ocasiones lo que se busca es encender las pasiones, tanto propias como las de la otra persona. Más que instintiva se trata de una conducta aprendida, de lo contrario siempre, en todas partes y todo mundo la hubiera realizado.

Llama la atención que siendo una caricia tan practicada sea tan poco estudiada científicamente, por increíble que suene escasean las investigaciones, quizá por considerarla solamente, como preámbulo para la cópula.

Se trata de un comportamiento más complejo, pues muchas partes del cuerpo entran en contacto; si hablamos del beso en la boca (salvo en las Personas con Discapacidad Visual) quienes participan se pueden ver a los ojos, aunque habrá quien los cierre para incrementar las sensaciones o por pena, y no faltará a quien le moleste que le vean en ese momento. Labios y lengua son estructuras con muchas terminaciones nerviosas o dicho de otra manera, altamente sensibles.

Para aumentar el atractivo y la tentación algunas mujeres se pintan la boca, como una especie de señal y aunque todo mundo pueda verla, eso no significa que estén autorizados para besarla.

Algo que puede desagradar, en primera instancia es que hasta 100 millones de bacterias pueden hallarse en un milílitro de saliva, pero entre ellas algunas son bactericidas, así que no hay tanto peligro, salvo que se tenga un padecimiento infecto contagioso y se transmita por esa vía. Lo que si conviene es tener buena higiene bucal, una amiga decía: “Besar a alguien que fuma es como lamer un cenicero”.

Como en todo lo relacionado con el comportamiento humano y sobretodo con la sexualidad, resulta indispensable el acuerdo, pero no perdamos de vista que hace tiempo se habló del “beso robado”, que llegó a considerarse como un romántico atrevimiento.

Es una caricia tan íntima que no se comparte con cualquiera, quizá el mejor ejemplo sea el de las Trabajadoras sexuales, quienes tradicionalmente se han negado a besar en la boca a sus clientes, pese a que acepten penetraciones vaginales o anales.

Quiérase o no en las parejas el beso evoluciona, suele comenzar como si se temiera dañar a la otra persona, por ellos los labios apenas se rozan, más adelante se  juntarán eso si con la boca cerrada, aunque cada vez con mayor fuerza; hasta que las bocas se abren para que las lenguas se enfrasquen en una especie de batalla donde chocan y luego traviesas explorarán la cavidad que les contiene. Si han llegado a estas alturas lo más probable es que hayan hecho lo mismo que el autóctono que charló con Malinowsy.

Alfred Charles Kinsey a mediados del siglo pasado comentó que 70% de las mujeres de su muestra había practicado el beso francés antes de su primera relación coital para sobrepasar el 90% después de haber tenido relaciones sexuales. Por cierto el beso francés también se conoce como profundo, o del alma y en México de “a lengüita”.

En una investigación realizada en el vecino país del norte, en el grupo de personas mayores de 50 años: dos terceras partes de ellos y la mitad de las mujeres dijeron ser capaces de abrazarse y besarse en público (2015.Schwartz & Kempner). Sin embargo, sugiero mediten UDS dónde hacerlo porque en Nigeria, Dubai, Indonesia, Iowa y hace unos años Guanajuato estaba prohibido hacerlo en la calle, y había penas que podían ser desde económicas, encarcelamiento y hasta latigazos.

La parte triste es que conforme pasa el tiempo, las parejas tenderán a besarse con menor frecuencia e intensidad, algo así como una regresión hasta llegar a darse besos sólo de a piquito. En ocasiones memorables, como la cena de Navidad o de Año Nuevo, se puede conseguir que los progenitores se den un beso para la foto.

En el final de la película Cinema Paradiso, se puede ver una especie de corto que Alfredo hizo para que Salvatore pudiera contemplar las escenas de los besos, que las tijeras censoras del sacerdote del pueblo habían eliminado de las películas, por considerarlas malignas y pecaminosas.

¿Qué crees que diría tu pareja si la invitarás, en esta cuarentena, a replicar esas escenas?

Bibliografía consultada:
  • Ariza Luis Miguel. Besos, ¿qué hay detrás? El País. Arte y Cultura. Octubre 18 del 2011
  • Choza Jacinto. Antropología de la sexualidad. Instituto de Ciencias para la familia. Sevilla, 2017:107
  • Hock Roger R. Human Sexuality. Pearson Education, 2012
  • Kinsey Alfred, Pomeroy Wardell, Martin Clyde and Gebhard Paul. Sexual Behavoir in teh Human Female. W. B. Saunders Company, 1953.
  • Schwartz Pepper & Martha Kempner. 50 Great Myths of Human Sexuality. Wiley Blacwell, 2015:91
  • Tüllmann Adolf. Vida amorosa de los pueblos naturales. Comportamiento sexual de las comunidades primitivas. Editorial Círculo de Lectores. España, 1960.    
  • Westheimer Ruth K. and Sanford Lopater. Human Sexuality. A Psychosocial Perspective. Lippincont Williams, 2002.

¿Es una infección de transmisión sexual el COVID 19?

Francisco Delfín LaraGrupo
Interdisciplinario de Sexología

Si bien cuarentena en un principio se consideraba como un lapso de 40 días, desde el punto de vista médico hace referencia a un tiempo durante el cual la gente sospechosa de algún padecimiento debe aislarse a fin de reducir la posibilidad de contagio. La séptima acepción del Diccionario de la Real Academia Española la define como: “Aislamiento preventivo a que se somete durante un periodo de tiempo, por razones sanitarias, a personas o animales”. La que estamos viviendo es el más claro ejemplo de ello pues ya suma infinidad de decenas de días, pero puede acabar siendo de meses o hasta de años, motivo por el cual ha generado inquietudes y cambios de comportamientos.

Una gran cantidad de personas pregunta si el COVID-19 puede clasificarse como una Infección de transmisión sexual, y eso nos lleva recordar lo sucedido con el VIH porque existen ciertas semejanzas. A principios de los ochentas del siglo pasado y dado el desconocimiento de esa entidad, se fabricaron falacias al por mayor, por ejemplo,  muchos consideraban que el virus podía adquirirse de muy diversas formas, incluso por medio de vectores como los mosquitos, igual por saludarse de mano o de beso en la mejilla o abrazarse. Todo ello fue fruto  de la discriminación que dañó a innumerables personas, tan es así que en un principio se habló de grupos de riesgo, y se sugería cuidarse de las Tres H’s: haitianos, hemofílicos y homosexuales. Después de mucho tiempo y numerosas investigaciones quedó claro que más que grupos de riesgo, lo más peligroso eran las prácticas sexuales de riesgo, es decir, tener relaciones coitales o hacer el amor sin protección.

La identificación de las vías de contagio: Perinatal, sexual y sanguínea permitió desarrollar estrategias para disminuir o erradicar los contagios, y ante la falta de tratamientos efectivos, se optó por lo más conveniente en Medicina, tomar medidas preventivas. Sin embargo, eso que se dice de forma tan sencilla se torna complejo ante la diversidad de grupos sociales. La mirada panorámica permitió tomar en cuenta no sólo los aspectos biológicos sino también los socioculturales; sin duda se han logrado notables avances pero aun queda mucho camino por recorrer porque después de miles de muertos, de personas que viven con el VIH y ante la mejora de los tratamientos aun siguen existiendo desigualdades, discriminaciones y hasta conductas irresponsables por parte de individuos que se ufanan de no protegerse al tener relaciones sexuales, con lo cual se ponen en riesgo, pero también a otras personas.

Retornando al motivo del presente escrito, puede afirmarse que el virus del COVID-19, se encuentra en la mayor parte de las secreciones de personas infectadas (en diferentes concentraciones), pero ello no significa que sea una infección de transmisión sexual. Pero cuidado, lo anterior no debe considerarse como un consuelo o un alivio porque aunque no se transmita por medio del semen o al tener relacionas vaginales o anales y aunque la persona use condón masculino o femenino, frente a un individuo infectado, el riesgo de contagio siempre estará presente. No perdamos de vista que hasta donde sabemos la transmisión se da por el efecto aerosol de las gotas que brotan al toser, estornudar o incluso hablar o cantar (Remember Luis Miguel).

Por la antes mencionado la Organización Panamericana de la Salud recomienda mantener una distancia de al menos un metro de las personas, pero los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades proponen que la sana distancia sea de dos metros (2020.Silberner).

Hablando de encuentros sexuales con parejas de quien se desconoce su estado de salud, la gente puede usar cualquiera de los condones, pero no deberá acercarse a menos de metro y medio de distancia a la otra persona, y por supuesto menos habrá de tocarse; ello se constituye según se tome, como  un desafío o una invitación a imaginar de qué otras formas se puede tener actividad erótica sexual sin entrar en contacto directo. No se trata de convertirse en un monje Cartujo, menos aun con las bondades de la tecnología, desde luego para quien cuente con algunas de ellas, además de los espacios que garanticen la intimidad para ponerlas en práctica frente a las cámaras, por escrito o en audio, esto es, todo aquello que sean capaces de crear o imaginar, cuidando de no subirlas al ciberespacio donde pierden todo control y pueden acabar como material pornográfico allende nuestras fronteras.

Hablando de pornografía existen personas preocupadas porque la gente menuda pueda dedicarse a buscar este tipo de material, ya no debajo del colchón o en los cajones secretos de papá o de los hermanos mayores, sino en los celulares o tabletas que están al alcance de todo mundo (2020.Perissini), bueno de algunas personas, porque quiérase o no hay gente que no sólo carece de celular, sino también de servicio de internet y vive en espacios tan reducidos que un cuarto se convierte en sala, comedor, recámara y hasta cocina. Pero para quienes si gozan de esos privilegios, resulta de fundamental importancia, estar al pendiente de los sitios que visita nuestra descendencia. Para contrarrestar tales peligros, conviene inventar actividades donde lo cibernético, por cómodo que sea, no se convierta en la parte medular; pero no faltará quien destaque la existencia de programas creados para evitar el acceso a sitios considerados como riesgosos, aunque siendo sinceros, es rara la gente adulta capaz de manejar bien la tecnología, a diferencia de la juventud que ha nacido en estas épocas de TIC’s, es decir de “Tecnología de Información y Comunicación”. Sería absurdo, a más de risible decir: “Hijo ponle este programa a tu computadora para que te impida ver cosas pornográficas”. Algunas sugerencias son bastante lógicas, pero su puesta en práctica estará rodeada de pretextos:

  1. El/la menor deben usar Internet supervisado por un adulto (responsable).
  2. Ubicar la computadora de tal modo que la pantalla sea visible.
  3. Compartir o navegar por Internet con su descendencia.
  4. Sugiera que le consulte cuando le pidan datos personales.
  5. Hable sobre la probabilidad de encontrar material pornográfico de modo que en vez de sentirse culpable, charlé con UD al respecto.

Desde luego cada punto da pie a infinidad de controversias, pero es una propuesta ante problemáticas actuales.   

Esta pandemia afecta a todo mundo pero la juventud pujante, caracterizada por intentar separarse de sus progenitores para convivir con la gente de su edad, de repente se ve recluida, y casi maniatada. Su sexualidad, quiérase o no se verá afectada, quizá comenzaba (aunque sus progenitores no lo crean) a realizar sus primeras exploraciones y de súbito el encierro le lleva al aislamiento. Lehmiller y colaboradores señalan la existencia de una especie de Revolución sexual, cibernética para más señas, en la que la juventud podrá comunicarse de muchas formas y verse compelida a hacer más frecuente aquello que había practicado antes como el “Sexting”.

La verdad es que estos fenómenos o comportamientos no son tan nuevos o consecuencia de este encierro, aunque si se han agudizado. Internet se destacó como un medio que permitía acceso a material pornográfico, chats sexuales, uso de cámaras con los cuales mostrarse, búsqueda de parejas (de todo tipo) y participar en juegos sexuales incluso en tercera dimensión, se sabía que los hombres eran los usuarios o clientes mayoritarios (2013.Riemersma & Systsma).

Quienes piensan que la presente es una época donde todo mundo pierde están en un error, pues no falta quien aprovecha los nichos emergentes, intenten averiguar cuántas App’s se han creado con propósitos erótico/sexuales y se percatarán que muchos creativos se llenarán los bolsillos de billetes. Al principio surgieron sitios gratuitos, pero al poco tiempo había que pagar para poder acceder, y se sabe de algunas personas que llegaron a tener problemas financieros por las cuentas estratosféricas que recibían, lo peor es que debían pagarse en secreto, esto es, sin que su pareja se enterara de tamaños desfalcos (2017.Wéry).

Hablando de otras estrategias viene a mi mente una consigna muy popular de los ochentas “Sólo con tu pareja”, sutil invitación que pretendía blindar las relaciones, imposible negar que sonaba bien, hasta romántico, sin embargo, era necesario enfatizar que eso funcionaría, siempre y cuando la pareja estuviera sana. Lo mismo podemos decir en la actualidad, si un miembro de la díada sale, resulta de fundamental importancia que extreme precauciones para disminuir, lo más posible las probabilidades de infectarse. En ese sentido y para quienes viven en pareja (sana) puede servirles explorar y experimentar nuevas fantasías, más allá de “Sale pan con lo mismo” o compartir fantasías sexuales; siempre y cuando dispongan del espacio, la privacidad y el estado de ánimo adecuado para explayarse. En otro momento hablaremos de la dificultad de conseguir tiempo y espacio para la pareja con hijos, pues los “angelitos” suelen desvelarse con singular alegría.   

En resumen y hasta donde se sabe COVID-19 no es una Infección de transmisión sexual, pero se contagia por medio de gotas provenientes de tos, estornudos o al hablar, también por tocar a personas infectadas. Si le confiere seguridad use condón masculino o femenino, pero absténgase de entrar en contacto con esa persona que acaba de conocer o ignora UD si está infectada. Eche a volar la imaginación y piense de qué forma se la pueden pasar muy bien, pero a distancia, algo así como a control remoto.

Bibliografía:

  1. Grubbs, J.B., Volk, F., Exline, J.J., & Pargament, K.I. (2015b). Internet pornography use: Perceived addiction, psychological distress, and the validation of a brief measure. Journal of Sex & Marital Therapy, 41, 83–106.
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